Davidovich,con el 'drive', en su duelo ante Schwartzman en el Masters 1.000 de París. Foto::EFE

Davidovich continúa con su progresión y ya es la quinta mejor raqueta española

Cierra 2020 como el 52º del 'ranking ATP' después de ser octavofinalista del US Open y de ofrecer un excelente nivel de juego tras el parón de cinco meses en el circuito a causa de la pandemia

Miércoles, 30 de diciembre 2020

Un antes y un después de la pandemia. Si para casi toda la humanidad la expansión del coronavirus sólo ha sido fuente de desgracia, en el caso de Alejandro Davidovich el periodo de confinamiento le benefició. Fueron más de cinco meses de parón en la ... competición (entre marzo y agosto) que aprovechó para hacer un trabajo físico muy intenso y otro no menos importante con su psicólogo de siempre, Antonio de Dios, para darse cuenta de que tenía que actuar con más dedicación.

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Algo más de dos meses (desde septiembre a inicios de noviembre) con un rendimiento excepcional han permitido al rinconero volver a cerrar con sobresaliente un año que empezó con dudas y que no era nada sencillo, al competir por primera vez únicamente en el ATP Tour, sin acudir a Challengers. Cerrar 2020 como el 52º mundial y la quinta raqueta española (ya sólo por detrás de Albert Ramos (46º), Pablo Carreño (16º), Roberto Bautista (13º) y Rafa Nadal (2º) da idea de lo conseguido con sólo 21 años y de lo que puede estar aún porvenir. Davidovich ha desbancado a su compañero en dobles en un par de torneos este año, Fernando Verdasco (64º), a Feliciano López (62º), con el que se ha entrenado en Marbella, y a Pablo Andújar (59º). Además, sólo tiene tres tenistas más jóvenes que él con mejor 'ranking' (el 21º, el canadiense Felix Auger Alliasime; el 43º, el serbio Miomir Kecmanovic, y el 44º, el italiano Jannik Sinner).

Davidovich no ha salido del 'top 100' en todo este 2020, aunque estuvo cerca. Empezó el 85º, pero varios malos resultados en tierra y ceder en la previa en Cincinnnati, en el regreso de la larga cuarentena, le dejaron el 99º. La gira sudamericana fue su momento más bajo, sobre todo al verse sorprendido por el local Hernán Casanova (366º) en Buenos Aires, y tras una dura contienda contra el también anfitrión Seyboth Wild (206) en Río de Janeiro y contra la grada de la pista.

Sin embargo, Davidovich, que estuvo dos semanas entrenándose en Marbella con el número uno mundial, Novak Djokovic, volvió a las pistas en agosto muy cambiado. Tras caer ante Berankis en la previa de Cincinnati, fue octavofinalista en el US Open, su mayor logro del año; pasó una triple criba en la previa de Roma ante sendos 'top 100'; fue semifinalista y cuartofinalista en los dos ATP 250 de Colonia, implantados en el calendario sin estar previstos, y llegó a octavos en un Masters 1.000, el de París. Su nivel de juego creció, a la par que otros tenistas acusaban molestias, se descartaban de cuadros o no estaban a la altura del primer tramo del año, afectados por la pandemia. Desde septiembre su balance ha sido de dieciséis triunfos y seis derrotas, de las que todas, salvo una (contra Lajovic) se produjeron ante los 'top ten': dos ante Schwartzman (verdugo del malagueño en tres de los trece torneos del curso) y Zverev, y una contra Rublev. Incluso venció a Khachanov (18º).

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Además, el pupilo de JorgeAguirre ha ganado partidos en todos los Grand Slam (no se jugó Wimbledon) y estuvo cerca de derrotar por primera vez a un 'top ten', porque tuvo bola de partido con 6-2 y 5-2 ante Schwartzman en los cuartos de final del segundo torneo de Colonia. Dispuso de tres juegos al servicio para cerrar la cita, en la que ofreció probablemente su mejor tenis de siempre, pero los nervios de ver tan cerca el logro le devoraron.

Otro de sus progresos, además de perderle el respeto en la pista a las grandes estrellas del circuito, se ha visto en pistas rápidas, donde hasta este 2020 no había ganado partidos en el ATP Tour. Su movilidad, que mejoran muy pocos tenistas, y la variedad, agresividad y descaro de sus golpes lo convierten en temible, siendo de los que mejor dominio tiene de la dejada y con unas estadísticas muy buenas al resto. Davidovich ha cerrado el año con otra novedad. Ha incorporado al excampeón del mundo de maratón Martín Fiz a su equipo de trabajo para ayudarle en su preparación. Ahora encara un ilusionante 2021 dispuesto a seguir subiendo peldaños en el 'ranking' y en busca de finales y, por qué no, algún título en el ATP Tour. El otro reto será acudir a los Juegos de Tokio, ya sea en el cuadro individual o en el de dobles, modalidad en la que, junto a Roberto Carballés, ganó el ATP 250 de Santiago de Chile.

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