Unanimidad política para afrontar los meses más complicados del año

Fuengirola no ha sido históricamente una localidad en la que el consenso haya sido protagonista, pero la situación provocada por la Covid fue determinante para alcanzar la unanimidad que esperaban sus ciudadanos. Todas las formaciones políticas representadas en el Ayuntamiento (PP, PSOE, Ciudadanos, Vox e IU) dejaron sus diferencias a un lado por el bien común del municipio y firmó un pacto de unidad para hacer frente a la crisis del Covid-19 a través del Plan de Reactivación Económica y Social, que incluye la eliminación y reducción de tasas e impuestos por valor de más de cuatro millones de euros.

El documento contemplaba la exención de la totalidad de la tasa de ocupación de vía pública del año 2020 (sillas, mesas, expositores, mercadillos y quioscos); una primera provisión de fondos de un millón de euros destinada a autónomos; exención de un trimestre de la tasa GEMER para actividades comerciales que hayan permanecido cerradas durante el estado de alarma; supresión del pago de un trimestre del canon a las concesiones municipales; reducción del 50 por ciento de IBI a los establecimientos hoteleros y reducción de un 50 por ciento del IAE municipal.

Apoyado por la oposición, el ejecutivo local tuvo que cambiar la tendencia de los últimos años de invertir en cultura y eventos públicos multitudinarios para aplicarlo a ayudas sociales, especialmente en una localidad que depende en gran medida del turismo. Aun así, la mejor noticia viene de la mano del Puerto, ya que 2020 se ha cerrado con un proyecto ya aprobado y que prevé cambiar la fisionomía de la localidad en los próximos años.

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