La Nochebuena deja en Málaga un repunte de denuncias por fiestas privadas y por burlar el toque de queda

Las autoridades prepararon un dispositivo especial cara a la Nochebuena para controlar, especialmente, la limitación de las reuniones familiares a 10 personas y dos grupos convivientes en Andalucía, así como el cumplimiento del toque de queda, fijado por el Gobierno andaluz a la 1.30 de la madrugada del 24 al 25 de diciembre. Con este objetivo, se estableció un refuerzo de agentes.

Fueron suficientes policías, pero no pararon. Fuentes del Ayuntamiento de Málaga destacaron las sanciones a ciudadanos por incumplir el toque de queda. Por ejemplo, agentes del Grupo de Investigación y Protección pararon diversos coches en el que los ocupantes fueron sancionados, ya que se encontraban en la calle sin tener un motivo para ello.

También se repitieron las denuncias por fiestas en viviendas. Tal y como estaba previsto, los agentes actuaron a requerimiento, es decir, gracias a las llamadas de los vecinos que denunciaban casos de incumplimientos de las medidas de la Junta de Andalucía. No fueron pocas.

Por ejemplo, policías locales de Málaga tuvieron que acudir hasta en dos ocasiones a una vivienda del Centro de la capital malagueña. Fueron varias las llamadas de vecinos que se quejaron de una fiesta en calle Canoa, hasta la que se desplazaron los policías locales. Pese a que el dueño, un viejo conocido de los agentes, no quiso abrir la puerta del domicilio, al final quedó sancionado por celebrar una fiesta con más de 15 personas. Estas actuaciones se repitieron, así como por celebraciones en la calle. Ejemplo de ello es lo que ocurrió en La Palmilla, donde los agentes descubrieron una celebración en la que participaba una veintena de personas.