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El Málaga vuelve a reactivar la ilusión de sus aficionados por ir a La Rosaleda tras los buenos resultados con la llegada de Pablo Guede. El debut del técnico argentino hace dos semanas frente al Valladold, que se cerró con un empate (2-2), generó un gran ambiente y una mayor expectación por ver 'in situ' al equipo blanquiazul.
La siguiente oportunidad es propicia y el club ha vuelto a confirmar más de 10.000 entradas y promociones para el partido de este sábado frente al Eibar, el líder de Segunda (a partir de las 18.30 horas). Con esta cifra de localidades aseguradas se preveía rozar la mejor entrada de la temporada en el encuentro contra el Valladolid, pero la ausencia de un gran número de abonados evitó llegar a la mejor entrada de la temporada.
El tope de esta campaña está en algo más de 22.000 personas, que asistieron en noviembre para el encuentro contra Las Palmas, precisamente la última victoria como local del Málaga. Según fuentes del club, en el último partido en casa algo más de 3.000 abonados no acudieron al estadio. Por esto la entidad de Martiricos está pendiente e intentando fomentar la presencia de los socios con carné para volver a los mejores números del curso.
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Sergio Cortés
Uno de los argumentos de peso del Málaga es la posibilidad de los abonados de prestar su asiento si no pueden ir al campo. Es una opción de que se abrió durante la temporada y sigue vigente. Se gestiona a través de la App o la web oficial del club y el abonado puede generar una entrada para su invitado que puede enviar al correo electrónico del interesado.
Aunque el llamamiento más destacado en la previa fue del entrenador, Pablo Guede, que apeló a sus momentos como jugador cuando más de 40.000 personas se congregaban en La Rosaleda para alentar al equipo hacia el ascenso en plena época de reconstrucción del club. En esos tiempos algunas de las gradas no tenían asientos y la posibilidad de ver el encuentro de pie aumentaba el aforo.
«A la afición les pido que vengan. El primer partido fue un sentimiento fortísimo. Creo que vamos a dar un buen partido. No está nada dicho. Y necesitamos de todos. Juntos es más fácil y eso no nos podemos permitir perdérmelo. Acerquémonos lo máximo a los 30.000 que entran en el estadio. Lo tenemos que lograr. Recuerdo que cuando yo jugaba cabían más personas y venían al campo. Somos una gran ciudad», animó Guede.
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