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El director general del Málaga, Richard Shaheen, reculó y aceptó finalmente ofrecer una rueda de prensa con preguntas en vez de la simple comparecencia que estaba prevista y que incendió los ánimos en los momentos previos. Había máxima expectación para escuchar la versión oficial ... del club tras las fulgurantes horas que se están viviendo en torno a la entidad y Shaheen lució su versión más diplomática ante un centenar de medios de comunicación en la sala de prensa Juan Cortés de La Rosaleda.
Acompañado por un asesor y abogado que ejerció también de traductor, David Díaz, el ejecutivo al frente de la nave del Málaga no fue del todo claro a la hora de despejar dudas sobre Víctor Sánchez del Amo, suspendido de sus funciones como entrenador el pasado martes tras descubrirse un vídeo suyo de contenido sexual. «El Málaga y Víctor Sánchez del Amo están actualmente en conversaciones sobre los diferentes puntos de vista deportivos y los recientes acontecimientos extradeportivos a fin de poder resolver la situación de manera amistosa y satisfactoria para todos.
El Málaga quiere condenar la vulneración al derecho a la intimidad de Víctor y continuará ofreciéndoles su apoyo a él y a las autoridades para que los culpables sean debidamente juzgados. Estas circunstancias extradeportivas también han dañado la reputación y la imagen del Málaga», leyó Shaheen del comunicado oficial previo a abrir el turno de preguntas.
A continuación, explicó las razones por las que se decidió apartar de sus funciones al entrenador: «La decisión de suspender temporalmente a Víctor tenía como objeto proteger al club y dar tiempo a Víctor para resolver este asunto con garantías», argumentó. Además, añadió: «Hasta que no se solucione la situación con Víctor no puede haber otro entrenador. El 'staff' actual será quien dirija al equipo». Es decir, el segundo entrenador que recaló en el Málaga con Víctor en abril del año pasado, David Dóniga, queda al frente. Ambos mantienen contacto continuo (al igual que con sus otros ayudantes), como se demostró en la cena que tuvieron Víctor y todo su cuerpo técnico el miércoles pasado y que fue captada por SUR.
Aunque aún no se sabe cómo se llegará al martes. En otro momento de su intervención, al hablar de quién se sentaría en el banquillo ante la Ponferradina, se mostró más enigmático: «Todas las opciones están abiertas». El club, sin apenas recursos para asumir otra ristra de despidos, busca un acuerdo «satisfactorio». Además, Shaheen habló de tener ya un plan previsto para activar en cuanto se cosume la negociación.
Más llamativas fueron las declaraciones del presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, que en una entrevista en 'El Larguero' (coincidiendo con la celebración del nuevo formato de la Supercopa) prometió un trabajo a Víctor en la Federación. «No se lo he dicho a él aún, pero si quiere siempre tendrá las puertas abiertas de la Federación. Ahora mismo no sé de qué. Será un puesto de trabajo humilde. Lo hablaré con el director deportivo, Molina, pero un profesional como él no se puede quedar sin trabajo, respetando mucho al Málaga, como una represalia al delito de chantaje y extorsión que está sufriendo» sentenció el máximo responsable de la RFEF.
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