Cada barco con agua para Málaga tendrá un coste de hasta un millón: de esto depende su precio

Fuentes técnicas explican que el coste de cada barco puede rondar el millón de euros. Otros expertos hablan de que en ningún caso bajaría de 500.000/700.000 euros. Un tercer grupo de los consultados dispara aún más estos costes calculados.

Todo esto se traduce en que tanto la Junta de Andalucía como las empresas públicas que suministran agua a la población han iniciado ya los contactos con las consignatarias, según ha confirmado SUR por varias fuentes del sector.

Además, a todos estos costes, más o menos objetivables, hay que añadir un factor que lo distorsiona todo: la fluctuación de precios por la demanda. Por poner un ejemplo, pasa con los camiones cisterna en verano, que llegan a disparar el precio del metro cúbico por encima de los 13 euros. Pasó con el inicio de la guerra de Ucrania, que alteró significativamente los fletes de barcos gaseros.

En el caso de Málaga, el primer condicionante es saber de dónde vendría el anhelado líquido. Algunas fuentes lo sitúan en el puerto de Lisboa (Portugal), que está cerca del gigantesco embalse de Alqueva, inaugurado en 2002, que es la mayor presa de Europa Occidental y regula el río Guadiana, en la región del Alentejo. Aunque también podría venir desde la desaladora de Carboneras, en Almería.

El segundo elemento clave es el que tiene que ver con las características del barco: su capacidad, sobre todo, pero también si es español o extranjero, y su antigüedad. «Hay que ir al mercado y buscar el barco, en función de la necesidad y de la capacidad de almacenamiento», indica un profesional portuario. Por el tipo de barco previsto, sí está decidido que se atenderá en el muelle 9 (el de contenedores) por ser el de mayor calado (16 metros), y que gestiona Noatum. Pese a todo, otras fuentes no quisieron descartar el muelle 7, que también tiene un calado apreciable (12,5 metros).

De entrada, varios profesionales consultados advierten de que hay muy pocos barcos de 100.000 toneladas disponibles en el mercado que estén preparados para transportar agua. Por tanto, es más factible que haya que utilizar buques de 40.000 toneladas. A partir de ahí, el flete marítimo (el alquiler del barco con la tripulación), tiene un coste de unos 100.000 euros por día; aunque, y aquí viene el primer condicionante grave, «el precio depende de la oferta y de la demanda, si hay barcos en el mercado o no», con lo que el coste se puede disparar.

Si viniera desde Lisboa, el tiempo de la travesía sería de unos dos días, más el necesario para la carga y descarga; el combustible y los gastos de tasas portuarias. Por lo que, de entrada, en vacío ya sumaría en torno a 400.000 euros por flete. El agua lista para beber tendría un precio en origen de unos cuatro euros por metro cúbico (otros 160.000 euros). Por lo que, en el mejor escenario posible, cada barco que venga rondará un mínimo de casi 600.000 euros. Pero esto son unas condiciones óptimas, que no suelen ser las habituales en el complejo mercado de la logística marítima. «Ahora hay que salir al mercado», advierte uno de los técnicos.

Otras fuentes hacen unas cuentas similares y elevan de partida esta cuantía a una horquilla de 750.000 a un millón de euros por flete; aunque con la dificultad de que nunca antes se ha producido este tipo de operativas en Málaga y esa falta de experiencia también juega en contra. Por tanto, con un presupuesto de 10 millones de euros al mes, se podrán hacer entre cinco y siete descargas (hay que tener en cuenta los viajes de ida, con carga, y vuelta, en vacío, que son más baratos), esto es, conseguir entre dos y tres hectómetros cúbicos.

Para que sirva como referencia, los tres meses del verano pasado, se extrajeron de los embalses de la provincia un total de 67 hectómetros cúbicos (para consumo y para riego); esto es, a un ritmo de 5,6 Hm3 a la semana. Por tanto, el aporte mediante barcos sería sólo una medida de refuerzo.

En cuanto al tipo de barco, se emplearán buques cisterna, de tipo quimiquero, con los tanques lavados y previamente analizados para garantizar su idoneidad. Precisamente, la escasez de oferta de este tipo de embarcaciones, unido a la elevada demanda que se está registrando por los problemas de sequía (Cataluña ya ha activado los contratos para este suministro) harán a buen seguro aumentar los precios, según las diversas fuentes técnicas consultadas.

Cataluña por ejemplo ya ha hecho públicos los datos de su plan. Son 22 millones de euros mensuales y 10 barcos para este operativo de emergencia. Serán buques procedentes de Tarragona, Carboneras (Almería) y Marsella (Francia). Su destino será el de evitar restricciones al área metropolitana durante el verano. Transportarán agua potable o prepotable, según el caso. El agua almeriense vendrá de los excedentes de la desaladora de Carboneras. El plan global asciende a 2,6 hectómetros cúbicos mensuales al cinturón de la Ciudad Condal.

En aquella comunidad autónoma han manejado escenarios de unos 4 euros por metro cúbico de agua tratada, y 1,60 euros, en el caso de agua en bruto. Son costes similares a los que están manejando en Andalucía, confirman otras fuentes.

El Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia sacó a concurso el suministro a mucha menor escala para 16 municipios de la comarca de Busturialdea. Son barcos de 4.000 metros cúbicos y trasladan agua desde Santurce a Bermeo. El coste mensual es de 1,17 millones.

Otro dato que ha trascendido en las últimas horas es que Renfe también podrá sumarse a las operativas de transportar agua, aunque su capacidad es 25 veces inferior.