Noelia Moreno se enfrenta a su primer mandato como decana de la Facultad de Ciencias de Salud, cargo que se hizo efectivo el pasado 2 de julio. Esta facultad, probablemente por las características de las titulaciones que oferta, siempre ha tenido decanas. A excepción del primer director de la entonces Escuela de Enfermería, que fue el actual rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez. La anterior decana de esta facultad, María Teresa Labajos, ha estado 16 años en su cargo, los mismos años que Noelia Moreno la acompañó como secretaria académica. «Toda mi vida universitaria la he desarrollado con cargos de gestión», cuenta Moreno. (Reportaje completo, aquí: Cinco mujeres dirigen los decanatos y direcciones de centro de la UMA)
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Como secretaria académica, Noelia Moreno asegura que creía saberlo todo sobre su facultad, pero el grado de responsabilidad al ser la que toma las decisiones finales en todos los acontecimientos que ocurran en el centro «pesa y lo notas». Asimismo, afirma sentirse muy segura y apoyada ya que cuenta con un equipo decanal que trabaja de manera muy cohesionada. «Sí que he notado una mochila que antes no tenía, porque aunque yo estaba con María Teresa Labajos en todo momento y sabía lo que hacía, al final era ella la que tomaba las decisiones», desarrolla. Lo que más le está costando es, sin duda, la adaptación de la organización académica y las prácticas externas por las condiciones del Covid-19.
«Nuestras cuatro titulaciones tienen prácticas externas obligatorias, no podemos sustituirlas», cuenta. Los estudiantes se encuentras en los hospitales y los centros de salud haciendo prácticas: «Hay que estar muy alerta».
«Siempre pienso que no quiero dedicarle menos tiempo a mis hijos que antes»
Primera fisioterapeuta
Moreno empezó la universidad con 17 años, estudiando la diplomatura de Fisioterapia en los sótanos del Hospital Civil. «Es la primera vez que en esta Facultad de Ciencias de la Salud la decana es una fisioterapeuta, es más, soy la primera fisioterapeuta a nivel nacional que dirige un decanato», apunta. Nada más terminar su diplomatura se puso a trabajar como fisioterapeuta, pero asegura que siempre mantuvo gran contacto con los profesores del departamento. En 1999 entró como ayudante en la universidad y en 2002 se sacó la plaza titular de escuela universitaria. Desde 2004, cuando María Teresa Labajos tomó su primer mandato, es secretaria académica de esta facultad.
Noelia Moreno asegura que ha recibido mucho apoyo de su familia respecto a su vida laboral. Tiene dos hijos, una de 15 años y otro de 9, y aunque asegura que le requieren mucha atención, «ya no son niños pequeños». «Todas las mujeres criadas en mi generación, incluida yo, tenemos el rol de madre muy afianzado», reconoce. La ayuda de su marido ha sido fundamental para embarcarse en este nuevo proyecto como decana. Fue él mismo quien la animó a presentarse y admite que el hecho de que sus hijos fueran ya más independientes fue un aspecto clave para que se lanzara. Respecto a la conciliación, Moreno asegura: «Siempre pienso que no quiero dedicarles menos tiempo a mis hijos que antes, pero bueno también tengo a mis padres jóvenes que me ayudan con la logística de recogida de niños (risas)».
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Afianzar la facultad
Asimismo, el hecho de que haya 5 decanas y 12 decanos y directores de centro en la Universidad de Málaga, Noelia Moreno lo achaca a la tradición de cada facultad. «Yo pienso que en cualquier facultad o escuela técnica si se presentara cualquier mujer tendría el apoyo de todos», afirma, y está segura de que las cinco mujeres decanas se sienten totalmente iguales que sus compañeros. «Yo creo que hoy en día y en el ámbito social en que nos movemos las profesoras universitarias estamos en igualdad de oportunidades», explica.
Noelia Moreno se ha propuesto en esta candidatura dar calidad a las formaciones universitarias que imparte la facultad, internacionalizar el posgrado y afianzar las líneas de movilidad para que se puedan formar en el exterior mejores profesionales sanitarios y de investigación. «Hemos sufrido un crecimiento cuantitativo tan grande en los últimos años que lo que nos gustaría es afianzarnos», narra. La facultad ha pasado de tener dos diplomaturas a cuatro titulaciones de grado, dos másteres oficiales y un programa de doctorado propio. «Nos gustaría meternos en una modificación de los planes de estudio, nosotros fuimos de los primeros que nos adaptamos al grado y nuestros planes de estudio son de 2009», cuenta la decana.
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Asimismo, quiere dejar claro que desde su punto de vista la universidad tiene que ofrecer un servicio a la sociedad. En ese sentido, desde la Facultad de Ciencias de la Salud cuentan con Unidades Docentes Asistenciales (UDA) donde el alumnado ofrece servicios a la sociedad malagueña.
De momento estos servicios se realizan desde los grados de Podología y Fisioterapia, pero Moreno asegura que quieren ampliar este servicio en Terapia Ocupacional y Enfermería. «Gente de fuera puede venir y está genial porque nuestros estudiantes hacen las prácticas ahí. Me parece una labor colaborativa muy importante», concluye Noelia.
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