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Sólo el vino y un tal Marcelinho Huertas (Sao Paulo, 1983) mejoran con los años. En el caso del genial base brasileño del Lenovo Tenerife es literal, convertido en una suerte de Benjamin Button del baloncesto español. El 25 de mayo hará los 41 y llega a la Copa del Rey como el jugador más veterano del torneo, pero su nivel sigue apelando a la excelencia (promedia este curso 14,1 puntos, 6,6 asistencias y 15,7 de valoración).
Con 21 puntos y 10 asistencias en la final de la última Copa, en Badalona, sólo un gran Unicaja le robó el MVP, que lógicamente no suele llevarse un jugador del subcampeón. Se ha convertido en el líder en la cancha del equipo más veterano del baloncesto español, en la mano derecha de Txus Vidorreta y, muy posiblemente, será un futuro entrenador, aunque se prevé que continúe al menos otra campaña en la pista. Su conexión con Gio Shermadini es total, después de muchas batallas juntos en la cancha.
Con 6 años Marcelinho ya jugaba en la escuela de baloncesto del Atletico Paulistano, y seguía los pasos de su hermano mayor. Le robaba las pelotas y se las llevaba a la calle para jugar con sus amigos. En casa lo hacía en una diminuta canasta que tenía en su habitación. Padre de tres hijos, decidió en 2017 pasarse al veganismo. Su estricta dieta, el yoga, las cámaras hiperbáricas y la meditación le han ayudado en el tramo final de su carrera, que muestra sorprendentemente una hoja de lesiones casi en blanco.
Marcelinho Huertas desembarcó en España muy joven para jugar la Liga de Verano de Fuenlabrada con el Breogán en 2003. Militaba entonces en el Pinheiros, y no fue hasta dos años después cuando fichó ya por el Joventut (2005-07). Su carrera ha tenido otros muchos destinos en España: Bilbao (2007-08), Baskonia (2009-11 y 2017-19), Barça (2011-15) y Tenerife (2019 hasta hoy), más un paso por el Fortitudo Bolonia (2008-09) y la NBA en los Lakers (2015-17), donde coincidió con la última temporada de Kobe Bryant, y en un periplo en el que nunca pudo disfrutar de demasiados minutos.
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José Miguel Aguilar
A su vuelta a España, al Baskonia, había dudas sobre si Marcelinho recuperaría el nivel de antaño, pero a la postre quedaron despejadas. Lo que casi nadie recuerda es que estuvo muy cerca de fichar entonces, en el verano de 2017 y tras dejar la NBA, por el Unicaja. Tras el fiasco de Oliver Lafayette, al que no se renovó por bajo rendimiento, y tras la marcha de Kyle Fogg al baloncesto chino. Joan Plaza, había dado el visto bueno a su llegada, cuando ya tenía 34 años.
Pero el contrato del fichaje de Huertas quedó en un cajón arrumbado. Gerard Darnés era su representante y la propuesta estaba en torno a los 750.000 euros, la mitad de lo que ganaba en la NBA, por un año. Al final tuvo más peso la gestión de otro agente, Claudio Villanueva, el artífice de la llegada de numerosos argentinos y brasileños al Baskonia. Este medió por deseo expreso de Prigioni, que era en ese momento el entrenador del Baskonia, y se cerró un acuerdo por 1,4 millones por dos campañas (en lugar de una en Málaga).
Marcelinho, que en octubre de 2021 apareció en los Papeles de Pandora tras abrir una sociedad 'offshore' en Panamá mientras jugaba en el Barça, se convirtió hace unos meses en el primer jugador extranjero en jugar mil partidos con equipos españoles. Es uno de sus numerosos récords en la ACB. Está también a un paso de destronar a Pablo Laso en el liderato histórico de asistencias, y se prevé que lo logre en marzo. Su tope en un partido son las 17 en Zaragoza con el Tenerife en enero de 2021, y su mejor partido fue la pasada campaña (mayo de 2023) ante el UCAM Murcia (43 puntos y 47 de valoración).
Además, es décimo en partidos jugados (646), el que más en activo, decimotercero en valoración, y decimoctavo en minutos y en puntos anotados. Ha participado en cinco Mundiales (2006, 2010, 2014, 2018 y 2023, con su tope en cuartos de final) y posee el récord de presencias junto a otros 25 jugadores.
En la Copa del Rey es el mayor asistente de siempre (151), por delante de Llull (113), el quinto con más partidos (31), por detrás de Felipe Reyes (51), Navarro (44), Llull (37) y Rudy Fernández (33), el duodécimo en victorias (17) y en valoración (con 308) y undécimo en puntos (281), tercero en activo tras Llull (396) y Rudy (363).
A nivel personal fue MVP de la Final Four de la Champions en 2022 y ha sido elegido cinco veces en el quinteto ideal de la Liga ACB (2008, 2011, 2020, 2021 y 2022). Ha ganado tres Ligas (2010, con el Baskonia, y 2012 y 2014, en el Barça), sólo una Copa del Rey (la de 2013, en el Barça en Vitoria, tras un 85-69 al Valencia), una Eurocup con el Joventut y una Champions (2022) con el Tenerife, por citar sólo lo más granado.
Cuando Marcelinho Huertas entre en acción este en el Martín Carpena se convertirá en el cuarto jugador de la historia de la competición en disputar un partido con 40 años o más. Joan Creus (TDK Manresa) y Darryl Middleton (Akasvayu Girona) lo hicieron en dos ediciones, mientras que Felipe Reyes se unió a esta exclusiva lista hace tres temporadas. Ninguno de ellos consiguió levantar el título, con lo que el base brasileño tiene la oportunidad de erigirse como el campeón más veterano de todos los tiempos. Es otro de los récords que puede batir.
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Mikel Labastida y Leticia Aróstegui (diseño)
Ignacio Lillo | Málaga
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