Dragan Milosavljevic, por fin

Fue el primer día en el que el jugador balcánico realizó lo que se denomina 'cinco contra cero' o lo que es lo mismo, movimientos para ensayar sistemas, pero sin contacto. Esta será su rutina durante al menos una semana hasta que llegue el momento y él se va con confianza para dar el siguiente paso, forzar más la rodilla y hacer la misma rutina de trabajo de todo el equipo. Cuando se capaz de mantener el ritmo de entrenamientos y su cuerpo esté en forma, el internacional serbio podrá estar disponible para Luis Casimiro.

Después de más de un año alejado de las pistas, el Milosavljevic que volverá será distinto. Conviene recordar que al final de la temporada 2018-2019, el alero acabó la Liga como un tiro siendo el jugador más destacado del Unicaja, que ya tenía apalabrada su renovación por dos campañas. De hecho el jugador rechazó dos ofertas de equipos de la Euroliga para seguir en Málaga.. En Valencia todavía recuerdan el primer partido del 'play-off' de cuartos de final en el que Milosavljevic firmó 28 puntos con un impresionante 6/7 en tiros de tres, cinco de ellos en el tercer cuarto.

Al poco de aquello llegó la grave lesión en la rodilla, la segunda de su carrera, pues cuando estaba en el Partizán sufrió el mismo percance en la derecha. Tras ser operado en Austria, el alero comenzó la rehabilitación en Belgrado y en noviembre volvió a Málaga para ver cómo iba. En Navidad también se le eliminaron unas molestias de menisco con una intervención rápida. Todo iba bien. El jugador trabajaba con Enrique Salinas, preparador físico de la selección y entonces todavía en la cantera del Unicaja, hasta que llegó el confinamiento. Aquello fue letal para Milosavljevic, que estuvo tres meses sin recibir tratamiento. Cuando el equipo volvió a entrenar, las sensaciones ya no eran las mismas, tampoco después del verano, aunque el serbio seguía trabajando duro cada día. Hace un mes, Casimiro torcía el gesto cuando se le preguntó por él y reconocía que el jugador tenía molestias en la rodilla. Con Salinas ya fuera del club, empezó a trabajar con José Cervi, preparador físico del equipo femenino. El jugador ha recuperado la sonrisa y está cerca de volver a jugar. Si no hay contratiempos, 'Gagi' podrá sentirse jugador otra vez.

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