El rol en la sombra de los asistentes de Sergio Scariolo

«Por lo especial que tiene, y lo inesperado es la medalla más importante, seguramente», sentenció Sánchez Cañete, de la máxima confianza de Scariolo, del que destaca «la capacidad que tiene para la gestión de grupos». «Justo después del partido ante Lituania es cuando vimos que se abría el camino de la medalla», admitió, y reconoció que «el secreto fue mucho trabajo, no sólo en cantidad, sino en calidad, y la química entre los jugadores, que ha hecho que el trabajo que hemos hecho haya explotado en la cancha».

¿Cuál es el papel de Sánchez Cañete, en un grupo con varios asistentes? «Mi trabajo es el de coordinador de ataque -explicó-. Luego, también cómo repartimos y ajustamos los minutos de juego, para que nadie se canse, y eso coordinado con los preparadores físicos y viendo quiénes son los contrarios para los emparejamientos. Pero a mí en la selección, en un campeonato u otro, me ha tocado de todo».

Sobre el papel de los dos jugadores del Unicaja, Sánchez Cañete, que en el tren de vuelta vio partidos del Den Bosch (posible rival en la Champions), comentó: «Estoy feliz por ver a Alberto brillar como sabemos que es él. Cada decisión de descarte que se toma es muy difícil, pero en el caso suyo todavía más por todos los intangibles que sabes que te va a dar. Fue duro su salida y por eso también fue duro su preparación». Y sobre Brizuela dijo: «No hay duda de que Darío ha generado el mismo rendimiento jugando menos y él se ha dado cuenta de cómo aprovecharse a sí mismo. Confío en que esa puerta que se le ha abierto la coja».

Finalmente, desveló que «el tiempo de estudio es limitado, porque hay que ofrecer un planteamiento de juego al equipo, y aplicarlo en la pista en el entrenamiento. Cuando se pasa ronda, esa noche es para trabajar, mientras descansan los jugadores. En menos de 24 horas hay que tener al rival estudiado para decir qué les vamos a proponer para ganar al partido.

Mientras, Enrique Salinas, describió que el torneo «ha sido una locura, con un equipo con muchas opciones, pero a la vez sin opciones, pero con un grandísimo entrenador que ha demostrado cómo hay que jugarle a todo el mundo». Salinas, desde hace años desligado del Unicaja, ha sido el responsable de los preparadores físicos, y elogió a Lorena Torres, «que es una especialista en rendimiento y recuperación, y ha sido fácil trabajar con ella y el doctor Salas».

Por último, Javi Salvo se estrenó en las ventanas FIBA como uno de los dos delegados de la selección. «Mi trabajo ha sido diferente al que hago en el Unicaja. Hemos llegado a tener a 44 personas viajando. También hay temas con FIBA, como subir a plataformas cierta información, pero te vas amoldando».

Para Salvo, «la clave, aunque suene a tópico, ha sido la humildad del grupo. Nadie apostaba por nosotros, pero por lo que he podido convivir con ellos desde las ventanas, nadie venía con egos, empezando por Rudy Fernández, que es una estrella. Se ha amoldado al grupo como capitán y ha dado ejemplo, con charlas de poner orden y de como ante Finlandia al descanso cuando íbamos perdiendo».