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La Inspección Técnica de Vehículo (ITV) es el engorroso examen que todos los vehículos tienen que pasar de manera periódica para garantizar que están en buenas condiciones de circular. Es un trámite del que no se libra ningún conductor, aunque sea con distinta periodicidad: en ... el caso de los turismos, están exentos de pasarla hasta los cuatro años del coche; a partir de los estos cuatro años, se tiene que pasar cada dos años, y cuando el vehículo tiene más de diez, tiene que hacerse una inspección cada año. Pero hay ocasiones en las que hay que volver a pasar la ITV antes de plazo, si se producen modificaciones destacables en el vehículo. El cambio de ruedas o neumáticos puede ser una de ellas.
Cuando se producen modificaciones que no afectan al funcionamiento del vehículo, no es necesario volver a pasar la ITV. Esto ocurre por ejemplo cuando pintamos o cambiamos el color de la carrocería o si instalamos un nuevo equipo de sonido. Pero, ¿qué ocurre cuando cambiamos las ruedas, algo habitual, ya sea por desgaste o por pinchazo? Pues en determinadas ocasiones sí nos obligará a volver a pasar la ITV, al igual que si instalamos por ejemplo un enganche de remolque.
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La Dirección General de Tráfico recuerda que algunas modificaciones como la instalación de neumáticos no equivalentes obliga al propietario del vehículo a realizar la Inspección otra vez, aunque aún no sea su plazo obligatorio. Esto significa que sí se pueden cambiar los neumáticos de fábrica del coche por otros de las mismas especifícaciones técnicas y medidas y entonces no sería necesario pasar la ITV. Para ello, habrá que mriar en la ficha técnica del coche si las nuevas ruedas son compatibles. Si no se cumplen los requisitos para los neumáticos que indica la ficha técnica (no puede por ejemplo cambiar el ancho de vía del vehículo con las nuevas ruedas ni tener un código de velocidad inferior al de serie), es obligatorio volver a pasar por la ITV para homologar estos nuevos neumáticos.
Por tanto, el titular del coche tendrá que volver a somerter el vehículo a la inspección con la documentación relativa al cambio de ruedas -o la reforma efectuada- y estos cambios se incluirán en la ficha técnica del vehículo. Si en eun futuro se vuelven a modificar, habrá que pasar otra vez por la ITV, Hay que recordar que no homologar una reforma de importancia puede suponer una multa para el conductor de hasta 500 euros.
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