Víctor Rojas
Viernes, 23 de junio 2023, 00:05
Sevilla. De pie sobre los asientos traseros de un descapotable beige llegó Vanesa Martín a la Alameda de Hércules. Con la bandera del colectivo al viento, y su coleta también, la cantante malagueña imprimió en el símbolo LGTBI el toque especial de los lunares. Una ... réplica de la versión que María del Monte popularizó el año pasado durante su pregón, en el que presentó a su mujer.
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Vanesa Martín no presentó a su pareja, pero sí anunció que tiene una relación. «Hoy es una mujer mi compañera, la que roba mis pensamientos», exclamó mientras la Alameda de Hércules estallaba en aplausos. La artista dijo ser discreta y que le gusta preservar su intimidad, pero sostuvo que nunca se había escondido. «Amé a hombres y a mujeres maravillosas, las calles son testigos de mi libertad», contó enfundada en su bandera de lunares. Eran las palabras más o menos esperadas después de que el presentador del acto la interpelara: «Sé lo que vas a decir y para adelante».
Fue durante su etapa de «probar suerte» en la música en Madrid cuando se dio cuenta. «No niego que fuera prudente y tuviera pudor esos primeros años en los que no sabía bien lo que me estaba pasando», admitió la artista. También argumentó que se confunde «la discreción y la intimidad con la negación». Notablemente nerviosa, no paró de recorrer el escenario mientras leía su discurso, en el que reivindicó que quiere que se hable de su trayectoria profesional y no de con quién se va a la cama. Con conciencia de que las etiquetas «forman parte de su identidad», la artista no dudó en afirmar que nunca ha permitido que las usen como «armas inquisidoras» para limitarla.
El Orgullo es un día de reivindicar. Un día –o un mes—en el que muchos ven el momento idóneo para expresar su orientación sexual o identidad de género. Sin embargo, Martín optó por lanzar un mensaje a quienes no lo hacen: «Os invito a no juzgar a las personas que aún no han llegado a reconocerse», empezó diciendo en un alegato en defensa de la «libertad» de cada uno. «Como leía a una seguidora días atrás, querer adueñarte de la sexualidad de una persona y de cómo y cuándo lo cuenta es igual de violento que una fobia».
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La cantante también hizo hincapié en que cada persona tiene un entorno, una educación y unos miedos diferentes. «Desde el amor, el respeto y la tolerancia se pueden construir y moldear muchas realidades. Libertad y tolerancia también para los demás», añadió, concluyendo esta parte del pregón.
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Pregón en el que también hubo tiempo para mencionar la política. «Hay personas que ejerciendo la política, cuando terminan su jornada, después de haber lanzado discursos de odio, se van a dormir y dejan las calles y las casas llenas de peligro», aseguró sin mencionar directamente a ningún partido ni a ninguna persona.
«Lesbianas, gays, bisexuales, ojo, que pareciera que porque hayamos estado con hombres y mujeres tenemos un punto menos en la ficha», se dirigió así la artista en un momento al público. Entonces se lanzó a interpretar una canción inédita con frases como: «He sido el amor de segundas, cabezas confusas, la cash converter»; un tema en el que hace una mezcla con el 'I will survive' de Gloria Gaynor.
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En definitiva, un pregón muy en la línea de sus pronunciamientos públicos sobre la cuestión LGTBI. Dijo tener una «compañera», que ha estado con hombres y mujeres, y que prefiere no hablar de ello porque cree que lo importante es su carrera musical; una carrera en la que ahora habla de placeres y pecados.
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