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La escena recordaba a ese día de vuelta al colegio tras las vacaciones. Con las ganas de ver que depara el futuro más próximo y saludar de nuevo a los compañeros. Esa analogía la han compartido muchos de los jugadores que desfilaron este miércoles por ... La Rosaleda tras más de 50 días lejos de ella por la crisis del coronavirus. La sonrisa era general, aunque también había cierto nerviosismo por cumplir sin fallos todas las medidas de seguridad antes de somterse a las pruebas que le señalaran su estado ante el virus y si son aptos o no para volver a la actividad.
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En el aire, se respira una ilusión especial por empezar a dar pasos hacia la vida de antes de la pandemia, pero también una potente concienciación con respecto a la situación. Juan Carlos, uno de los capitanes y de los integrantes con más antiguedad en el vestuario malaguista, ofreció a SUR sus sensaciones tras completar esta primera parte del procolo. «Bueno, es un poco raro pero teníamos tener ganar de vernos y estar en contacto, aunque nos tengamos que saludar desde lejos. Ahora paso a paso, a ver qué tal los resultados y poder entrenar cuanto antes, que hay ganas», dijo en un primer momento. También sintió como «rara» esta primera toma de contacto Juanpi, quien aseguró que «vamos a estar pendientes a lo que nos digan y adaptándonos a lo que se nos venga». «Estamos con muchas ganas de volver al terreno de juego y llevando como podemos las reglas que LaLiga nos dice», expuso Luis Muñoz.
Sobre las pruebas a las que han sido sometidos tantos los jugadores como los técnicos y algunos empleados del equipo, Juan Carlos cuenta que «los 'test' son un poco incómodos, da bastante cosquillas, aún así pensaba que iba a ser peor. Lo que pasa es que tengo buena nariz y a mi me ha ido mejor», bromeó. También desprendió felicidad el malagueño Luis Muñoz, que también atendió a este periódico a la salida de La Rosaleda, desde su coche. «Los test son rápidos pero algo incómodos, sobre todo los de la boca y la nariz, que son verdaderamente desagradables», compartió el canterano.
Luis Muñoz también se expresó sobre otras tareas que realizaron además de dejar su saliba y sangre para ser analizada. Les analizaron a nivel físico (parámetros de grasa, por ejemplo) y recogieron la ropa de entrenamientos que irán administrándose ellos mismos a partir de ahora. «La prueba de la grasa y la forma física bien porque hemos estado entrenando mucho con ejercicios y videoconferencias en casa. Es la ropa que vamos a tener que ir lavando nosotros para que haya menos contagios o si hay alguno que no se propague en el club», explicó.
Para finalizar, Juan Carlos reflexionó sobre este protocolo para reactivar el fútbol: «Quiero ser positivo y quiero pensar que todo va ir bien pero está claro que tenemos que ser responsables. En este ambiente es verdad que siempre se olvidan las cosas externas pero tenemos que ser responsables porque es una cosa muy seria. Nos han dado la ropa para venir ya vestidos desde casa. Es verdad que será un poco como volver a cuando nos duchábamos en casa de pequeños después de entrenar. Es lo que toca, hacer las cosas correctas para evitar contagios», terminó.
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