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Sergio Pellicer regresa a su casa tras un paréntesis importante. Será su tercera etapa en el primer equipo (una como jugador y la segunda en el banquillo como técnico principal). Dirigir al cuadro blanquiazul siempre fue su gran reto profesional, aunque llega en una situación ... especialmente delicada, en plena crisis de resultados y con el cuadro de Martiricos en descenso. El técnico castellonense, aunque asentado en tierras malagueñas, tiene muy claro que puede cumplir con los objetivos, pero explicó en su presentación que será necesario variar muchas cosas y que mejore la trayectoria. «Tengo una fuerza enorme. Mejor club que el Málaga para ir sería imposible para mí», destacó, la vez que adelantó que está ya en marcha para afrontar los siguientes partidos. «Hoy -por ayer- ya hemos hecho un trabajo técnico-táctico. Hay que tener muy claros los conceptos de cómo queremos atacar, defender, el tema de transiciones... Sobre todo hay que estar cohesionados. Es verdad que el equipo siempre está en los partidos. Haré lo que vean mis ojos. Hay que ser inteligentes y tomar las decisiones que hagan mejores a los jugadores. Hay futbolistas que pueden dar mucho más, porque lo han demostrado en temporadas anteriores. El que ha sido buen futbolista, lo será siempre. Muchos veces depende de la mentalidad, de la cabeza...».
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Sobre su regreso, además de agradecer al club que confíe nuevamente en él, comparó la etapa anterior con la actual. «Vuelvo a mi casa. Ha pasado un año y medio. Cuando nos hicimos cargo del equipo había una situación económica e institucional peor. El año siguiente fue duro, pero hay diferencias. Ahora el club ha dado pasos adelante, en lo económico, en infraestructuras y en el trabajo. La situación cambia en lo deportivo, donde estamos en menos 4. Antes salimos adelante con la unión, tomando las mejores decisiones y que los jugadores estuvieran convencidos. Ahora tenemos una plantilla buena, podemos acabar con un equipo mejor. Entonces estábamos limitados por el tema de fichas. Nos quedan dieciocho etapas, como un ‘play-off’ en el que estuviéramos a cuatro puntos de buscar un ascenso. En eso tenemos que pensar, sobre todo mis jugadores, que son los verdaderos protagonistas», subrayó.
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Considera que el trabajo realizado hasta ahora no debe caer en saco roto, por lo que deberá adaptarse inicialmente a lo que se ha encontrado al llegar. «Cuando se está a este nivel de resultados cada compañero tiene que aprovechar el trabajo del técnico anterior. Siempre hay vínculos, y es normal, pero los jugadores deben tener esa personalidad de superviviente y estar preparados para cambios. Mientras antes estemos preparados es mejor», explicó. «Tengo un análisis de toda la categoría. He estado viajando. He visto al Málaga y tengo que poner las cosas positivas que he visto, pero hay algo que ocurre. Los resultados no funcionan», agregó.
«Cada uno tenemos un sello. Me conocen. Saben la idea que podemos tener. Luego cada plantilla tiene un perfil. Pero en esta categoría hay que tener un estilo eficaz, practico y con ideas muy claras. El que ha sido un buen jugador no se puede perder de la noche a la mañana. Estamos aquí para sacar rendimiento. Ahora puedes hacer un once inicial con un mejor equipo. Eso hace dos años era difícil por la situación que teníamos», analizó, mientras que recordó su salida: «Vengo del barro. Es así. Antes no continué en el Málaga por un tema personal. Este club me lo ha dado todo. Era lo mejor para mí, pero en esta vida se dan situaciones y en ese momento decidí, por mi forma de trabajo y por mucha cosas, salir y ahora estaba con el bicho dentro y esperando».
El nuevo técnico develó cuáles serán sus primeros pasos en relación a los jugadores. «Lo primero es hablar con los capitanes. Quiero ser muy claro con el futbolista, ser inteligente y, si un jugador saca discrepancias con otro, perdemos todos, pierde el equipo, Tenemos que ir todos juntos de la mano», comentó. Y también se refirió a la posibilidad de que haya más fichajes, pero no le preocupa demasiado. «Me interesan los que van a jugar el domingo. Para lo otro está la dirección deportiva. Me centro en los jugadores, que los tenemos que hacer mejores», indicó.
Sólo cinco partidos con público
Recordó que en su etapa anterior apenas pudo contar con un estadio con aficionados por la pandemia, algo que ahora será diferente. «No pude disfrutar más que cinco partidos con público. El día del Zaragoza perdimos, pero el equipo hizo un gran partido. Había mucha conexión. Esa fuerza bruta que tiene La Rosaleda se tiene que hacer visible. Pero tenemos que jugar nosotros e intentar emocionar. Sabemos que vamos a sufrir, pero hay que hacerlo entre todos. Nunca les vamos a devolver a los aficionados lo que ellos nos dan. La única forma es dando lo máximo», afirmó. «Esto se saca con trabajo, esfuerzo y tomando decisiones inteligentes. Quiero que el equipo pueda ilusionar y transmitir que es valiente. Al final esto va de resultados, no queda otra», dijo.
El técnico entrante sabe que está en juego el proyecto del Málaga y se mostró claramente concienciado de la labor que le queda por delante en los próximos cuatro meses. «Tengo una responsabilidad muy grande. Os pido de corazón la ayuda de todos. No hay salvadores, ni héroes ni villanos. Los protagonistas son los jugadores», indicó Pellicer, a la vez que se refirió a los canteranos, sus opciones y otros asuntos de los partidos: «Haremos lo que veamos en el día a día. El único titular es el escudo. Jugar un minuto es igual que hacerlo 90. Los equipos que encajan más goles en la segunda parte están por abajo. Y por eso los cinco cambios nos tienen que dar más».
En última instancia, Pellicer quiso mandarle un mensaje a los futbolistas y también a la afición en relación al trato que tendrá con los profesionales. «A los jugadores les hablo claramente a la cara. Sabrán lo que voy a querer de ellos. Me he encontrado un grupo que está abierto. Otros grupos son más difíciles de gestionar. Aquí no hay egos, hay que sacar esta situación adelante. Vamos a intentar entre todos que ciertos jugadores puedan rendir a nivel colectivos con pequeños detalles», repitió el entrenador en una larga comparecencia en la que analizó sus planes y también echó la vista atrás para recuperar ciertos aspectos de su anterior etapa en el club.
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