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El Eibar, próximo rival del Málaga en Liga (este sábado, 20.30 horas) parte esta temporada como el equipo con mayor potencial económico de la categoría al contar con un techo de gasto de 30 millones de euros. Aunque es más elocuente la cifra que ... desembolsó el verano pasado para reestructurar toda la plantilla tras el descenso de Primera tras siete años en la máxima categoría. En total se gastaron 20 millones de euros en fichajes para revitalizar el proyecto e intentar la vuelta a LaLiga Santander en la primera ocasión.
Con ese presupuesto lograron cerrar un total de 15 fichajes, entre los que se encuentran los exmalaguistas Blanco Leschuk, Óscar Sielva y Rahmani. Como ellos, el Eibar se lanzó a contratar jugadores que habían dado un contrastado rendimiento en la categoría. Como definió el entrenador del Málaga, José Alberto, «son una selección de los mejores jugadores de Segunda en la temporada pasada». Lejos de pagar sueldos desorbitados a jugadores de Primera para Segunda, la dirección deportiva se ha hecho con un vestuario de efectivos con experiencia en la división de plata y que tienen la ambición de jugar al máximo nivel como principal ilusión para sus carreras.
Una hábil jugada que le ha colocado en los puestos de arriba desde el principio. Con un balance de 10 victorias, cinco empates y cuatro derrotas, se sitúa tercero de la clasificación con 35 puntos, los mismos que tiene el segundo, la Ponferradina. Esta es la primera vez que baja de la segunda posición, zona de ascenso directo, y ha sido por culpa de su última derrota en la pasada jornada contra el Zaragoza (1-0).
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A pesar de ser considerada una de las plantillas más completas, con demarcaciones dobladas y reforzadas con futbolistas de alto nivel, no ha terminado de obtener números determinantes. Ni son los mejores anotadores (28 tantos a favor), ni tampoco la mejor defensa (22 goles en contra). Precisamente sobre su poca fiabilidad defensiva es de lo que más se habla a la hora de sacar un pero al equipo, que luce su superioridad, pero no termina de demostrarla.
Esta semana vuelve a Ipurúa, su estadio, con las expectativas de volver a tener cobijo en casa, donde ha logrado siete victorias consecutivas, su mejor registro histórico en todas las competiciones. Un fortín inexpugnable para un Málaga de fogeo fuera de casa (sólo ha sumado 3 puntos de 23 posibles). El Eibar contará con las bajas seguras de los defensas Venancio y Franchu, y el centrocampista Óscar Sielva. También es duda Etxeita, aunque todo apunta a que llegará para el partido.
A la hora de destacar a los jugadores más indiscutibles del Eibar en estos momentos, los protagonistas son el centrocampista Expósito y el atacante Stoichkov. Hay otros como Javi Muñoz, que también es clave en la dirección del juego, pero los dos primeros son los más determinantes. Expósito, procedente del Deportivo hace varias temporadas tras una fuerte apuesta del equipo, está rindiendo a un gran nivel con el diez a la espalda. Es un todocampista con llegada y gran criterio. Sin ir más lejos lleva cinco goles en Liga, una condición de goleador que está descubriendo.
Un once titular probable, con esquema 3-5-2 Yoel; Tejero, Arbilla, Sergio Álvarez, Etxeita, Correa; Javi Muñoz, Expósito, Stoichkov, Corpas y Blanco Leschuk.
Pero en cuanto a goles el que se lleva la palma es Stoichkov, un viejo anhelo del Málaga. El de La Línea de la Concepción y al que el conjunto blanquiazul ha intentado fichar en varias ocasiones, está firmando su mejor temporada y ya acumula nueve tantos siendo el máximo artillero del equipo. Su perfil es camaleónico. Puede partir desde la banda en un inicio, pero luego se presenta con habilidad en la zona del segundo punta y es muy escurridizo a la hora de ofrecer continuos desmarques y romper la línea defensiva. Sin duda, el gran generador el equipo, que cuenta con muchos otros registros.
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Si hablamos de jugadores, es inevitable señalar que en la actual plantilla del Eibar, extensa y muy compensada, se encuentran hasta tres exmalaguistas. Estos son el excanterano Óscar Sielva y los atacantes Blanco Leschuk y Rahmani. Aunque de estos tres, el que más importancia ha conseguido es el ariete argentino, Blanco Leschuk, quien es titular y se ha convertido en una pieza habitual de Garitano por su preeminencia en el juego aéreo y de espaldas a portería.
Ni siquiera la mediática llegada del campéon del Mundo, Fernando Llorente, le ha movido de su puesto. El riojano, de vuelta en su carrera deportiva tras pasar por varios países y el clubes importantes, es habitual en la rotación y como revulsivo para desatascar los partidos. Por otro lado, Óscar Sielva por lesión y Rahmani por falta de minutos, no son habituales en estos momentos. El primero no podrá volver a enfrentarse al Málaga (al que sabe lo que es marcarle un gol y en La Rosaleda). El segundo, podría jugar, aunque se le esperaría desde el banquillo.
«El Eibar es un equipazo y en todas las estadísticas está en lo alto de la clasificación. De ritmo de juego, de posesiones en campo rival y de acciones finalizadas. Cuenta con dos alineaciones titulares en su plantilla. Puede jugar tanto partidos más combinativos como encuentros más directos con jugadores como Blanco Leschuk, Fran Sol o nada menos que Fernando Llorente. Tenemos que hacer todas las cosas que estén en nuestra mano bien, no cometer errores porque penalizan mucho», añadió en la previa José Alberto, entrenador del Málaga.
El Eibar ha demostrado que quiere apostar a valor seguro en su intento de volver a ascender en la primera oportunidad y no iba a ser menos a la hora de elegir entrenador. Tras el legado de Mendilibar, que estuvo seis temporadas en club y alcanzó los mejores años de la entidad, el reto de reconducir el equipo recayó en las manos de Gaizka Garitano, una institución también el el conjunto eibarrés. El que fuera jugador del equipo en dos etapas distintas llegó a la élite de los banquillos con el Eibar, al que en la 12-13 lo llevó de Segunda División B a Segunda, y consiguiendo el ascenso a Primera División la temporada siguiente, en la 13-14.
El entrenador vizcaíno dirigió al equipo en su primera campaña en la máxima categoría, la 14-15, en la que el Eibar consiguió la permanencia debido al descenso administrativo del Elche. Fue sustituido y luego pasó por Valladolid, Deportivo, Bilbao Athletic y Athletic Club antes de arrancar en la 21-22 su segunda etapa al frente del Eibar. Se trata de un técnico pragmático y que defiende un fútbol solvente, físico y rápido. No se resiste a hacer cambios y el último ha sido el de configurar una defensa con tres centrales ante los excesivos goles en contra recibidos.
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