La memoria viva de Martín Carpena

El 15 de julio es una fecha teñida de negro en el calendario malagueño desde que hace dos décadas, un comando de ETA asesinó a José María Martín Carpena a las puertas de su vivienda en la barriada de Nueva Málaga delante de su esposa, Elvira Calvente, y su hija, Mariché. Hoy, veinte años después de aquella trágica noche de verano, la memoria del exconcejal de Carretera de Cádiz y Puerto de la Torre se mantiene viva y la ciudad le ha rendido un emotivo recuerdo con el doble objetivo de homenajear su figura y de que las nuevas generaciones no olviden el daño que la banda terrorista provocó en la sociedad y la democracia española.

A lo largo de la mañana se han sucedido los actos, en todos los cuales ha estado presente la familia y que comenzaron con minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento de la capital, al que ha asistido el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. A su término, el patio del Museo de Málaga ha acogido un acto institucional en el que han tomado la palabra el alcalde de la capital, Francisco de la Torre, el presidente de la Diputación, Francisco Salado, el subdelegado del Gobierno, Teófilo Ruiz, y la delegada provincial de la Junta, Patricia Navarro. El último de los eventos, organizado por los populares, ha tenido lugar, como ya es tradicional, ante el busto de Martín Carpena levantado por suscripción popular en el parque Huelin, a cuyos pies se han depositado casi una veintena de ramos de flores de instituciones públicas (Consistorio, Junta y Diputación), partidos políticos (PP, Nuevas Generaciones, PSOE y Adelante Málaga) y ciudadanos anónimos, al que ha seguido el rezo del Padrenuestro y un sentido y prolongado aplauso.

En sus diferentes intervenciones, los responsables públicos, además de recordar la figura del que fuera concejal popular, han hecho un llamamiento a no olvidar el daño causado a lo largo de su negra trayectoria de ETA. Un mensaje que adquiere un mayor calado cuando desde algunas voces se intenta blanquear el historial criminal de la banda terrorista y después de que en las elecciones vascas del pasado domingo Bildu obtuviera su mejor resultado histórico en las urnas.

Por ello, Juanma Moreno ha subrayado que el de hoy es un día «triste y doloroso pero también es el día de la dignidad, del recuerdo, de la memoria y de la reivindicación de la justicia». «No queremos olvidar. Los demócratas no podemos, no debemos olvidar los asesinatos, la barbarie y el sufrimiento que provocó ETA», ha recalcado, al tiempo que ha recordado que aún quedan asesinatos terroristas sin resolver y «asesinos sueltos sin pagar por los delitos que cometieron».

En este sentido, Moreno ha dicho que le «duele» que se hagan concesiones a los terroristas con acercamiento a cárceles del País Vasco, que se hagan homenajes en los ayuntamientos vascos ante la pasividad del Estado o que el gobierno pacte con Bildu, partido que «no condena el terrorismo».

En esa línea, Elías Bendodo, consejero de Presidencia y presidente del PP de Málaga, ha dicho que reflexionando sobre lo ocurrido en estas dos décadas desde el asesinato de Martín Carpena la conclusión es que los demócratas «no podemos estar satisfechos» con lo que ha pasado y ha aludido a los buenos resultados obtenidos por Bildu el pasado domingo. «Algo estaremos haciendo mal los demócratas no sólo en el País Vasco sino en toda España para que esto se produzca», ha lamentado.

Patricia Navarro ha incidido en ese argumento criticando que los constitucionalistas aún no pueden andar con tranquilidad por el País Vasco, donde, según ha dicho, hay personas que «escupen» la memoria de las víctimas y reciben como héroes a sus asesinos.

Francisco de la Torre, que ha evocado los 854 asesinados por ETA, los 3.000 heridos que dejó y los 86 secuestros que llevó a cabo dejando un reguero de «dolor», ha sostenido que la banda terrorista buscó con sus acciones doblegar la democracia y que la mejor respuesta que se le puede dar es mantener vivo el recuerdo de sus víctimas y «defender, reforzar y prestigiar» la democracia.

Junto a ello, para el regidor hay una tarea pendiente y es que quienes apoyaron a ETA desde el apoyo manifiesto o el silencio «cobarde» se den cuenta de su error y ha puesto en valor la respuesta que Málaga dio al asesinato de Martín Carpena con una multitudinaria manifestación dos días después en la que la ciudad dio «un ejemplo de unidad contra el terror y en defensa de los principios democráticos».

Por su parte, Teófilo Ruiz ha mostrado el apoyo del Gobierno a los familiares y amigos de Martín Carpena y ha afirmado que el recuerdo a las víctimas es un ejercicio de «justicia y de valores». «Ninguna democracia es digna si no pone por delante a quienes han sido asesinados o perseguidos. No se debe caer en fáciles neutralidades, en la equidistancia ni en el discurso de que hay dos bandos porque sólo hay asesinos y víctimas», ha remarcado.

Francisco Salado ha mostrado su reconocimiento y admiración a la familia por haber soportado con «entereza» el dolor y ser un modelo de «dignidad». Además, el presidente de la Diputación ha instado a rebelarse contra quienes quieren «falsear la historia y se sitúan en la equidistancia de situar en el mismo plano a víctimas y verdugos».

El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín; el vicepresidente de la Diputación, Juan Carlos Maldonado; el portavoz del gobierno en esta institución, Juan Cassá -que ha estado cerca pero sin ni siquiera mirarse con sus excompañeros de partido de Ciudadanos -; los portavoces municipales Susana Carillo (gobierno), Elisa Pérez de Siles (PP), Daniel Pérez (PSOE), Eduardo Zorrilla (Adelante Málaga) y Noelia Losada (Ciudadanos); el subdelegado de Defensa, coronel José Antonio Leiva; el comandante naval de Málaga, capitán de navío Ignacio García; el comisario provincial, Javier Peña Echeverría; los expresidentes del PP Manuel Atencia y Joaquín Ramírez; o el presidente de la Cámara de Comercio, Sergio Cuberos han sido algunas de las autoridades y representantes de la sociedad malagueña que han participado en alguno de los actos celebrados para recordar la figura de José María Martín Carpena.