¿Cómo puedo saber qué etiqueta ambiental tienen mi coche o moto?, ¿tengo que llevarla?

Otros municipios no obligados como Alhaurín de la Torre también avanzan en estos entornos, que, en general, prevén una aplicación progresiva. Por ejemplo, Torremolinos ha anunciado que no multará los primeros seis meses tras la entrada en vigor.

El mapa es complejo, por lo tanto, y difícil de sintetizar. Pero, en todos los casos, hay un cuestión clave, que 'abre o cierra barreras', la etiqueta ambiental del coche.

¿Cómo saber qué etiqueta ambiental tiene mi coche o mi moto? Pues es sencillo e inmediato, en este apartado de la página web de la Dirección General de Tráfico. Simplemente, introduciendo la matrícula, el sistema contesta en tiempo real. Y, lo más importante, se trata de un trámite completamente gratuito.

Ahora sobre viene la segunda pregunta, ¿es obligatorio lucirla para acceder a un área restringida? La respuesta es no, aunque se recomienda lucirla visible a la derecha del parabrisas. Pero no es obligado llevarla porque los sistemas de control y de sanción a las zonas de bajas emisiones se realizan mediante sistemas de cámaras y de lectura de matrículas. Muchos conductores se preguntan por las restricciones de su propio municipio, pero cabe recordar que en cualquier ciudad de España están vigentes y es la base de datos de la DGT la que está conectada a estos sistemas tecnológicos.

¿Puedo adquirir esta pegatina? Sí, una vez comprobado que tenemos derechos al distintivo, se puede tramitar en oficinas de Correos; en la red de talleres de la Confederación Española de talleres (CETRAA) y otras redes de talleres autorizados; con gestores administrativos; en el Instituto de Estudios de Automoción (IDEAUTO), y, para el caso de flotas, en la asociación Ganvam. Los costes son variables pero rondan los 5 euros.

En Málaga capital, se siguen teniendo kilómetros de fibra óptica que conectarán las 97 cámaras y 53 puntos de control. Es precisamente el cuello de botella en el suministro de estos componentes, junto con el retraso de la ordenanza, el que ha demorado la activación de esta área reservada que, al final, entrará muy progresivamente en vigor. Y las restricciones inicialmente serán sobre todo para los vehículos de fuera.

¿Qué significa cada etiqueta? Son cuatro. La más limpia, la etiqueta 0 emisiones, color azul corresponde, según la DGT, a «eléctricos de batería (BEV) , eléctricos de autonomía extendida (REEV), eléctricos híbridos enchufables (PHEV) con una autonomía de 40 kilómetros o vehículos de pila de combustible».

La segunda en eficiencia, la Eco, verde y azul es para híbridos, gas o ambos. «Tendrán derecho a esta etiqueta eléctricos enchufables con autonomía inferior a 40 km, híbridos no enchufables (HEV), vehículos propulsados por gas natural y gas (GNC y GNL) o gas licuado del petróleo (GLP). Deben cumplir los criterios de la etiqueta C», se añade.

El límite de lo contaminante a medio plazo, el nivel de tranquilidad para los conductores dicho de otra forma, es la etiqueta C. Es de color verde y ahora mismo es la mayoritaria en el parque móvil malagueño. «Tendrán derecho a esta etiqueta turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero de 2006 y diésel a partir de septiembre de 2015. Vehículos de más de 8 plazas, excluido el conductor, y pesados tanto de gasolina como diésel, matriculados desde 2014».

La cosa se pone más complicada ya con la etiqueta B. No se venden coches nuevos con esta categoría, pero sí hay que recordar que en la provincia por cada vehículo nuevo matriculado se venden cuatro de segunda mano con una edad media superior a los 13,4 años, según datos del sector de la automoción. Y es que la realidad de las familias, lastrada por la economía y los costes, y la incertidumbre de los compradores ante este escenario de regulaciones hacen que la venta de coches eco o cero no vaya al ritmo esperado. La citada etiqueta amarilla es para «turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas desde el 1 de enero de 2001 y diésel a partir de 2006. Vehículos de más de 8 plazas y pesados tanto de gasolina como diésel, matriculados desde 2006».

En el caso de la B, además, ojo a los cambios de titularidad y ventas. En Málaga capital, en este arranque laxo citado de la ZBE, todos los turismos y motos empadronados en la ciudad podrán acceder, aunque los que no tengan etiqueta o sea B perderán el derecho si se transfieren.

Por último, el resto de vehículos, los más contaminantes, no tienen derecho a etiqueta alguna y lo van a tener cada vez más complicado para circular por entornos urbanos. Sigue habiendo 249.957 coches sin distintivo y 289.953, con el B, en la provincia, según datos de los concesionarios, Faconauto.