

Secciones
Servicios
Destacamos
El paso de dos danas casi consecutivas por la provincia de Málaga sigue alimentando a los embalses. La curva de crecimiento se ha aplanado, pero ... todavía sigue al alza con diferencias territoriales. Por ejemplo, en los pantanos del Guadalhorce ya se empiezan a notar caídas leves, en tanto que La Concepción, entre Marbella e Istán, sigue recogiendo volúmenes apreciables y se sitúa casi al 65% de su nivel de llenado.
Las escorrentías por episodios tan irregulares no suelen ser tan eficaces como las de borrascas como las de marzo de este año, con lluvias abundantes sin picos de riesgo, constantes y bien repartidas por cuencas, pero son un verdadero balón de oxígeno para una provincia que había iniciado el otoño y el año hidrológico asomada al abismo de su peor nivel en seis años.
Tras la Semana Santa, los embalses siguieron creciendo hasta el 13 de mayo, día en que iniciaron su caída en picado. Esos 170,92 hectómetros cúbicos se quedaron en apenas 94. Ahora, se vuelven a recuperar esas pérdidas y se superan los 171 hm3. Hay un pequeño crecimiento desde la semana pasada y son 60 hm3 más que el año pasado por estas fechas. Están al 28%.
Las medidas de ahorro impuestas tras el verano se han publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) este miércoles. Sin embargo, es posible que sean revisadas. El próximo Comité de Sequía estaba previsto para después de Navidad, aunque finalmente será en los primeros días de diciembre, tal y como ha avanzado este miércoles el consejero de Agricultura, Ramón Fernández Pacheco.
Los expertos fijarán previsiblemente la salida de la Costa del Sol de todo umbral de sequía, dado que La Concepción supera estos niveles de largo. Pero son límites móviles en este caso: 30,5 hm3 embalsados en diciembre; 34,3 hm3 en enero; 37,4 en febrero, y sucesivamente hasta un máximo que parece difícil de alcanzar como son los 50,4 hm3 de mayo. Ahora almacena más de 37. Son dos veces y media más que el año pasado.
Las lluvias también le han servido de mucho a La Viñuela, en la Axarquía, que llega a triplicar los niveles del año pasado. Va camino de los 36 hectómetros cúbicos. Es agua para año y medio de consumo urbano, pero necesita alcanzar los 41,5 hectómetros para pasar del nivel más grave de sequía al más severo. No parece probable salvo precipitaciones abundantes.
En el Guadalhorce, sólo el Conde presenta mejores niveles que el año pasado. La DANA no fue generosa especialmente con estas reservas porque los puntos de máxima precipitación se localizaron aguas abajo. Con todo, es posible que pasen de sequía grave a severa porque superan ampliamente el umbral de 71,4 hectómetros; en especial si se tienen en cuenta los 14,5 hm3 que atesora Casasola, en Almogía, convertida en recurso estratégico. Las buenas perspectivas con los pozos del Bajo Guadalhorce también ayudan al optimismo, pero son muchos años de escasez y hay que ser prudentes. Guadalteba almacena 29,45 hm3; el Guadalhorce, 18,77, y el Conde, 29,11.
También sigue bajando con un caudal aprovechable, aún más alto que el consumo de la capital, el Guadalhorce por el azud de Aljaima. Este miércoles por la mañana eran 2.240 litros por segundo (la ciudad consume 1.500).
Cabe recordar que la menor evaporación de estos meses también ayuda a recuperar las reservas, aunque también se han producido pequeñas pérdidas por maniobras de limpieza en desagües de fondo. Los niveles evaporados a lo largo del año no son despreciables: en años buenos de lluvia los pantanos pueden llegar a perder entre 20 y 30 hectómetros cúbicos por este fenómeno.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.