Daniel Pérez apostará por la presencia de Pedro Sánchez en su campaña para hacerse con la Alcaldía de Málaga

«Voy a hacer una campaña basada en la ciudad y sí me voy a apoyar en el presidente del Gobierno. Yo soy del PSOE y no me voy a esconder y todo el apoyo que pueda tener del presidente del Gobierno, bienvenido sea. Cuánto más venga, mejor», dejó claro.

De esta manera, Pérez también quiso desmentir a voces y analistas que estiman que la imagen de Sánchez está deteriorada en estos momentos ante la opinión pública y que, lejos de ser un reclamo electoral, su mera presencia acabaría restando votos.

Es más, el candidato socialista, que se presentará por segunda vez, hizo una reivindicación permanente de las últimas políticas sociales impulsadas por el Gobierno. Puso como ejemplo las medidas para intentar mitigar el precio de la luz y el aumento de las pensiones para paliar la pérdida de poder adquisitivo por la inflación, además de enfatizar la permanente vocación del Ejecutivo para combatir las desigualdades: «La pensión va a subir ahora de media 84 euros, defiendo las medidas sociales que está haciendo el Gobierno de España».

Preguntado por cuál sería el eje de su intervención en caso de salir investido alcalde, señaló que la política de vivienda será uno de los pilares a los que se dirija toda su estrategia de gobierno. El análisis que hace Pérez es el que parte de una realidad en el que la vivienda ha dejado de ser accesible para la mayoría de los malagueños y, por lo tanto, requiere de intervención directa.

En este sentido, prometió la construcción de 10.000 viviendas asequibles por parte del Ayuntamiento en solo un mandato. «Voy a cambiar la política de vivienda porque a mí me duele que 5.000 malagueños ya se han tenido que ir de la ciudad y no se ha hecho nada», dijo.

En cuanto a la deuda que generan los impagos de los alquileres sociales por parte de los inquilinos, que ascienden a 22 millones de euros, Pérez instó al Instituto Municipal de la Vivienda a idear fórmulas de pago que permitan recuperar ese dinero. Además, prometió la eliminación de las plusvalías municipal en la herencia en la vivienda habitual.

Pérez considera que la limpieza, más bien la falta de la misma, es otro problema que padece Málaga. «La ciudad está sucia y esa es la realidad. Y la culpa es del equipo de gobierno, que ha abandonado los barrios», dijo. El candidato socialista no puso en duda la municipalización de Limasa, que ahora es Limasam, pero denunció que los ocho millones de ahorro que se generarían cada año al hacer la empresa en pública no se estarían invirtiendo en contratar a más personal y a renovar la maquinaría.

En el plano cultural, Pérez anunció una auditorio integral para conocer al detalle el funcionamiento y el coste que tienen los museos para la ciudad. «No voy a tocar nada de lo que funciona», dejó claro, aunque señaló que algunos espacios merecen ser repensados. En este punto, puso el foco en el Museo Ruso.

Preguntado sobre una infraestructura deseada, señaló el soterramiento de las vías del tren para conectarlas con el puerto. El proyecto de De la Torre para reordenar todo el eje litoral, acuñado como 'Plan Málaga', lo calificó de «quimera».

Pérez también abordó los Presupuestos Generales del Estado y la partida destinada a Málaga, una de las menores a nivel provincial. «Las cifras hay que explicaras. ¿Si los 227 millones de ahora son pocos qué era con Mariano Rajoy», se preguntó. El líder de los socialistas malagueños argumentó que las cantidades varían en función de las grandes infraestructuras que se realizan, y que Málaga «ya tiene las grandes infraestructuras hechas». En todo caso, matizó que «yo siempre voy a pedir lo mejor para Málaga». En este sentido, reclamó su responsabilidad para que la candidatura de la Expo 2027 cuente con una partida de 1,3 millones de euros. En relación al tren litoral, deslizó que no existe una concreción sobre qué proyecto se quiere construir y aludió a que primero se tienen que poner de acuerdo los propios municipios implicados.

Por último, insistió en que su futuro político está centrado de lleno y en redondo en Málaga. «No aspiro ni a ser diputado ni a ser parlamentario», subrayó. Aunque, eso sí, esquivó la pregunta de si se presentaría una tercera vez a la Alcaldía de Málaga en caso de no lograr vencer a De la Torre.