Bancosol inicia su Gran Recogida: «Se te ponen los pelos de punta cuando donan algo»

Alcampo, El Jamón, Carrefour, Carrefour Market, Día, los supermercados de El Corte Inglés, Eroski, Lidl, Makro, Mas, Maskom y Mercadona se han llenado de 4.100 voluntarios que con sus chalecos amarillos, una tira de pegatinas en sus manos y una sonrisa dibujada en la cara se están acercando a los clientes de los diferentes establecimientos, con el objetivo de pedir ayuda para los que más lo necesitan.

Desde los más jóvenes a los más adultos, pasando por universitarios y trabajadores. Nada es un impedimento para este grupo de voluntarios que tiene un objetivo muy claro: ayudar al prójimo. Además, en un año donde se calculan que dos millones de kilos de alimentos menos se distribuirán en el 2024. De ahí, que la recolecta alimenticia haya cogido una mayor importancia.

Desde 2020 el método ha sufrido cambios; de donar alimentos en los propios supermercados a optar por la ayuda monetaria mediante transferencia, bizum o añadiendo una cantidad a la cesta de la compra, de esta manera se realizan los donativos en la actualidad.

Manuel Calvo, delegado de los voluntarios de CaixaBank y colaborador habitual de la Gran Recogida, es sincero con respecto a este cambio de modelo: «los años que se recogían alimentos físicos era más bonito». Aunque también admite que había más inconvenientes: «Por ejemplo, la leche que se recauda ahora en tres meses ya no vale. Pues ahora sí. Al recoger dinero, luego ellos van retirando la leche en Mercadona, en el Carrefour, en todos los centros que colaboran a medida que les van haciendo falta», explicaba Manuel Calvo.

Las expectativas ante este nuevo año son optimistas, aunque comprenden que es difícil superarse año a año. Sin ir más lejos, en el 2022, Málaga quedó segunda a nivel nacional en las cadenas de Mercadona. «Málaga es muy solidaria y estamos seguros de que responderá, como ha respondido en otras muchas ocasiones», confía el delegado de los voluntarios de CaixaBank.

No hay una solución a corto plazo para la necesidad de alimentación por parte de una parte de la población. Más de 14.000 niños reciben la alimentación por parte de Bancosol, de ahí que Manuel Calvo defina como «clave» este tipo de iniciativas.

Este voluntariado, unidos por una causa común, han tenido diferentes procedencias. Personas de diferentes edades, con diversas situaciones y múltiples mentalidades que conforman el grupo de voluntarios de etsa Gran Recogida.

Por ejemplo, Cristina Villega durante la crisis de 2008 tuvo que recibir ayuda y descubrió todo el trabajo que hay detrás. «A mí me ayudaron en mi tiempo y ahora yo también quiero ayudar», afirma de manera rotunda.

Maika Navarro, por su parte, colaboraba en un banco de alimentos en Barcelona y desde que reside en Málaga lleva dos años participando en la Gran Recogida. «Se te ponen los pelos de punta cuando la gente dona algo. Si piensas en la gente que no puede comer ni un paquete de arroz, ni un grano, es muy triste», apuntaba entre lágrimas la voluntaria.

Los jóvenes de la Universidad de Málaga también están teniendo un papel fundamental en la recolecta. Estudiantes de ingeniería de la salud, psicología, finanzas y contabilidad, traducción y turismo… Todos han decidido echar una mano y aportar desde sus circunstancias particulares.

No solo universitarios son partícipes de esta iniciativa, Victoria Salvatierra e Isabel Jarpeñas, alumnas del colegio Sierra Blanca, también se han unido con el objetivo de ponerse «en el lugar de los demás».

Tanto es así, que Isabel Mistral Piqueras, encargada del grupo del colegio Sierra Blanca en la Gran Recogida, entiende que la idea de que los jóvenes ayuden en este tipo de actividades «son semillitas», que les proporcionan a ellos «esa conciencia social». «Son pequeñas actividades que desde el colegio siempre se fomentan y creo que es muy importante», reincide ella.

La diversidad de experiencias y la unión en pro de un objetivo común destacan la solidaridad presente en la Gran Recogida organizada por Bancosol. Esta colaboración demuestra cómo diferentes sectores se unen para enfrentar desafíos sociales, subrayando la importancia de la empatía y la acción colectiva en la búsqueda de soluciones solidarias.