«Conocer a Bancosol me ha cambiado la vida»

Juan Carlos Delgado llevaba diez años trabajando en su quiosco de Marbella, pero la pandemia hizo que cerrase la persiana para siempre. «Me vi en la calle. Meses después del coronavirus tuve que dejar mi negocio... Nosotros nunca habíamos acudido a ninguna asociación porque siempre nos había ido bien, pero era imposible sostener el trabajo. Al poco de cerrar el quiosco se nos estaban acabando los ahorros y acudimos a las asociación a que nos diesen alimentos», confiesa el marbellí. Él, junto a su mujer y una hija de 11 años, lograron salir adelante y gran parte de culpa la tiene Bancosol, además de las ganas y el empeño de la misma familia de Juan Carlos. «Ellos nos informaron de que había cursos para hacer y poder tener más oportunidades de trabajo, no dudamos en hacerlos. Mi mujer lo está terminando ahora, está haciendo las prácticas. Yo ya estoy trabajando», explica Juan Carlos Delgado.

«Esto ha sido como un rayo de luz, estudié el curso de Mozo Valet y ahora trabajo en Hotel Occidental Puerto Banús. Era urgente conseguir un trabajo y gracias al curso que me ofreció Bancosol lo tengo», confiesa aún emocionado. Y lo agradece: «La gente se cree que Bancosol es alimentos pero es que es eso y mucho más. Te ayudan a formarte y conseguir un trabajo para salir de esa situación vulnerable en la que muchos, por desgracia, nos hemos encontrado. Esto llega y no sabes cuándo ni cómo, le puede pasar a cualquiera», confirma Juan Carlos Delgado.

La alegría de haberse encontrado con Bancosol también es algo que cuenta Mariza Ovelar que, separada y con dos hijos, acudió al Ayuntamiento de Archidona para ver qué podía hacer para conseguir un trabajo porque había perdido el suyo. Allí le ofrecieron ayudas para el tema de pagos de alquiler y alimentos. Fue entonces cuando conoció a Bancosol: «Conocerlos ha cambiado mi vida. Para mí esto ha sido una alegría porque yo he mandado muchos currículums y me había ofrecido en muchos trabajos, pero no conseguía nada. Empecé a estudiar el curso de Auxiliar de Ayuda a Domicilio, hice las prácticas con Atende y ahora soy fija. Cuando me llamaron ni me lo creí, esto es una gran oportunidad», detalla Mariza Ovelar.

«Esto es increíble, de verdad, yo estoy muy agradecida... Es muy importante esta labor que hacen desde Bancosol porque va mucho más allá de los alimentos, nos ayudan a hacer un camino y a seguir avanzando en positivo. Yo ahora sigo haciendo cursos para formarme y mejorar en mi trabajo, que me encanta», asegura Mariza Ovelar.

La joven Miriam Domínguez solía ir a la asociación a por alimentos de Bancosol y una de las veces se lo comentaron. «Me contaron que si estaba interesada en hacer cursos que iban a comenzar. Sin pensarlo les dije que sí, que me apuntaran a todo. Yo tengo dos hijas, una de 15 y otra de 13 y vivo sola. Estaba deseando encontrar un trabajo establece que nos diese tranquilidad», cuenta la malagueña de 32 años. Ahora, tras hacer la formación de Carnicería y Charcutería, trabaja en Maskom: «He trabajado muchas veces y siempre ha sido muy inestable. He estado con muchas empresas de trabajo temporal y en la última me despidieron al año. Ahora estoy muy contenta y cómoda porque la verdad es que este trabajo me gusta, no pensaba que iba a ser así», admite Miriam Domínguez.

Como dice ella misma, «hay mucha gente necesitada y siempre hace falta una pequeña ayuda». Por eso es esencial colaborar con lo que se pueda en esta Gran Recogida que llega este fin de semana, para que personas como Juan Carlos, Miriam y Mariza puedan tener la oportunidad que todo el mundo merece. Bancosol estará presente en más de 300 supermercados de toda la provincia y con más de 4.000 voluntarios informando cómo donar a través de la caja del supermercado, bizum o transferencia.