De la Torre confía en que sea «plenamente factible» la convivencia de los inmigrantes con los vecinos de Churriana

Al término de este encuentro, el regidor ha señalado a SUR que la situación de inmigración que se vive en Canarias, donde la isla de El Hierro ha recibido en seis meses migrantes que superan en número a sus habitantes, obliga a «hacer un esfuerzo de acogida». No obstante, ha admitido que, para ello, «hay que cumplir las normas», y ha recordado que las obras de adaptación de la antigua residencia de las monjas de La Asunción para centro de acogida de la CEAR se están llevando a cabo con la presentación de una declaración responsable que, a raíz de las denuncias de los vecinos, está siendo inspeccionada por la Gerencia Municipal de Urbanismo.

De la Torre ha apuntado que esa inspección «no se ha podido culminar» y, en el encuentro con los vecinos, se les ha detallado que el inspector municipal no pudo acceder al recinto del edificio para comprobar si los trabajos que se están llevando a cabo se corresponden con la declaración responsable presentada porque se le impidió el paso. «Urbanismo está en ello y tomará las determinaciones que tenga que tomar en lo que legalmente corresponda», ha afirmado el regidor.

No obstante, ha señalado que, en el caso de que el centro de acogida de la CEAR cumpla las normas para poder implantarse en Churriana (actualmente se encuentra en unas instalaciones anexas al colegio Unamuno, en Miraflores del Palo, que tiene que abandonar a finales de este mes al extinguirse el acuerdo con la propiedad de este centro escolar), el Ayuntamiento hará «una labor de acompañamiento» para que la convivencia entre los migrantes y los vecinos «sea factible».

«Confío en que sea plenamente factible y no se sientan solos ni ahora ni después», ha remarcado el alcalde, quien ha aclarado que ese «acompañamiento» podría ser un apoyo social o una mejora de las conexiones en transporte público de esa zona de Churriana ante la llegada de unos migrantes que van a suponer duplicar la población que actualmente acoge.

Por su parte, Alejandro Vedia, presidente de la comunidad de vecinos de El Olivar, considera que los trabajos de adaptación del edificio que se están llevando a cabo no pueden estar amparados por una declaración responsable. «Aparentemente, las obras que se están haciendo para adaptar el edificio no corresponden con la declaración responsable que han presentado. Y muy mala señal es que no dejan entrar ni a la Policía Local ni al inspector de Urbanismo», ha manifestado al término de la reunión con el alcalde, a la que han asistido también la concejala de Urbanismo, Carmen Casero, y el gerente, José Cardardor.

«Estamos esperando a que salga el informe de Urbanismo, pero entendemos que no es un uso compatible y lo hemos argumentado», ha añadido este portavoz vecinal, quien ha precisado que, según se observa desde el exterior del inmueble, los trabajos han incluido la reforma del sistema de extinción de incendios del edificio y la colocación de dos grandes salidas de humo, entre otras cuestiones. «Cosas que no son obra menor», ha asegurado.

A raíz de este asunto, el equipo de gobierno municipal va a llevar al pleno de este mes una moción para solicitar al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones «información precisa sobre el número de plazas de refugiados previstas en nuestra ciudad y conocer si esa cifra se va a ampliar en los próximos meses». Asimismo, en la moción, los populares piden al Gobierno que «la acogida de inmigrantes se planifique de forma equitativa en las distintas ciudades españolas, en proporción a su población y capacidades».