La Casona del Parque

El PSOE contraataca: vídeo denuncia del patrocinio de 100.000 euros a la empresa en la que está en excedencia Pineda

En el pleno ordinario del mes de febrero, el pasado jueves, la oposición pidió sin ambages su dimisión y la concejala ni siquiera tomó la palabra para contestar a dos mociones urgentes del PSOE y Con Málaga con este objetivo, en el que hacían valer el «conflicto de intereses». Hoy, el PSOE del Ayuntamiento de Málaga vuelve a la carga con un 'reel' en el que denuncia este contrato. Nada más empezar el vídeo, la fachada del Ayuntamiento se tambalea con la palabra «escándalo», y sigue afirmando: «100.000 euros, dinero público, adjudicación directa. Una concejala de Cultura, que trabajo en la misma empresa que recibió la pasta. Huele a chamusquina».

El vídeo puntualiza con sorna que es «casualidad» que Mariana Pineda siga en excedencia en la misma empresa que organizó el Observatorio de la Cultura en el Albéniz, criticando que el dinero «se haya dado sin concurso público y sin explicaciones». El portavoz socialista, Dani Pérez, aparece durante su intervención en el pleno: «Esto es muy grave. Se saltan todo lo que son los procedimientos administrativos, todos los procedimientos de la ley». El 'reel' continúa diciendo que la oposición ha pedido explicaciones, que «el PSOE ha exigido la dimisión de Pineda y una comisión de investigación, pero el PP lo ha bloqueado. ¿Acabará en los tribunales? Corrupción, nepotismo. ¿Simple coincidencia? En cualquier caso son 100.000 euros de tu bolsillo. ¿Te parece normal?».

La intervención del alcalde de Málaga, Paco de la Torre, en el pleno, fue bastante llamativa, pero mucho más por lo que no dijo, que realmente por lo que expresó. En el debate de las mociones urgentes, la oposición, pedía la dimisión de Mariana Pineda, el cese del gerente de Promálaga, Francis Salado, por ser el que suscribió el contrato y la reprobación del regidor. La viceportavoz de Con Málaga, Toni Morillas, insistía a De la Torre al final de su tercera intervención y cierre del debate: «Que en un escándalo de las dimensiones que estamos hablando usted no tome la palabra para decir algo... Y yo le insisto: ¿Usted puede poner la mano en el fuego de que no ha habido ninguna comunicación desde el área de Alcaldía con Promálaga diciéndole que se hiciera este patrocinio?» o «la señora Pineda ¿puede asegurar que no hubo ningún correo electrónico entre el área de Cultura y Promálaga?», indicaba añadiendo que la gente está harta porque se vive uno de los mayores dramas habitaciones de la ciudad, «que en vez de dedicarse a atender esta situación estén con estas historias». El alcalde le contestaba: «Señora Morillas, sepa que al tema de vivienda le dedico muchas horas, centenares de horas, pero a este tema cero minutos. Solamente asistí al acto que estaba en mi agenda (el Observatorio de la Cultura, el evento patrocinado en el cine Albéniz). Cero minutos», y añadía que respaldaba la intervención en el pleno de la concejala de Nuevas Tecnologías, Alicia Izquierdo, de las explicaciones sobre el contrato de Promálaga. La respuesta de Mariana Pineda se quedó en el aire. Ni la concejala intervino, pese a que la oposición pedía su dimisión, ni el alcalde dedicó un solo segundo en la sesión plenaria a defenderla.

La celebración del Día de Andalucía tuvo que ser en el patio de Banderas del Ayuntamiento de Málaga, ya que la alerta naranja planeaba, al igual que este lunes, en la ciudad. El lugar elegido, año tras año, es en el monumento a Blas Infante, al inicio de la calle Cuarteles (enfrente el edificio del antiguo Correos), pero en esta ocasión no era viable por la amenaza de lluvias.

El acto, comentan los invitados, no fue tan lúcido como cuando se celebra al lado de la escultura de Blas Infante, aunque se le puso el mismo cariño que siempre. Pese a todo, dejó la máxima de una tendencia para próximas ediciones: el verde oliva, el color del árbol por antonomasia de Andalucía, el de los ‘aceituneros altivos’, que tuvo un gran protagonismo en camisas, vestidos, chaquetas e incluso corbatas para la ocasión de los invitados al encuentro. Pero entre tanto verde de los campos andaluces, hubo un ‘match’, que ha sido estos días bastante comentado. Las dos concejalas populares, la de Urbanismo, Carmen Casero, y la de Fiestas y Servicios Operativos, Teresa Porras, lucían un atuendo similar, en el que sólo había una diferencia: el color de sus camisas. Por lo demás, ambas populares, que iban juntas, lucían blazer de terciopelo verde y pantalón de cuero negro. Y lo más curioso: yendo prácticamente iguales, apenas se separaron. Se ve que debían estar encantadas con la coincidencia.