Las dos prioridades del alcalde de Málaga frente a las inundaciones: el encauzamiento del Campanillas y la presa de río Grande

Este mediodía la puerta del Ayuntamiento de Málaga estaba literalmente cerrada, había que llamar para que abriesen, apenas 30 funcionarios en sus puestos porque se había impuesto el teletrabajo, pero el alcalde de Málaga, Paco de la Torre, ponía el salón de Espejos a funcionar para la rueda de prensa en la que hacía una valoración del paso de la DANA por Málaga, en la que felicitaba a los malagueños por ser prudentes y hacer caso a la alerta roja y también a los efectivos de la Policía Local, Bomberos, Protección Civil y otros servicios municipales que trabajaron para atender a la población. Dos conclusiones han quedado claras de su rueda de prensa, que ha sido retransmitida por streaming para los medios de comunicación. Para defender a Málaga de las inundaciones, el regidor ha afirmado que es esencial que se encauce el río Campanillas, que ayer estuvo a punto de desbordarse y que fue el motivo por el que se desalojaron tantas familias, y que se construya la presa de río Grande para evitar las avenidas de las zonas más altas, que desembocan en la ciudad de Málaga.

De los puentes plaza del Guadalmedina, subrayó que Urbanismo o Promálaga hará un estudio para ver su viabilidad y que se construyan con toda la seguridad posible. Lo decía específicamente por los arroyos que vierten en el cauce aguas abajo del embalse, que son los que ayer aportaron un mayor caudal en las horas de máximas precipitaciones.

Del río Campanillas, subrayó que la presa de Casasola ha sido esencial para evitar las fuertes avenidas, pero que todavía queda la cuenta pendiente de que se encauce un río que ha dado muchos sustos a la ciudad, ya que los arroyos que vierten en el cauce bajo provocan que el caudal suba brutalmente, como pasó ayer alcanzando los 250 metros cúbicos por segundo, mientras que en la cola del embalse había 500 metros cúbicos por segundo, de ahí que el regidor subrayase la importancia de la presa de Casasola, que debe acompañarse con el encauzamiento del río.

Sobre este particular, De la Torre subrayó que el proyecto inicial es «muy duro», con muros de hormigón, y que la idea actual es que fuese un proyecto más ambiental conforme a los nuevos tiempos, con un parque fluvial. ¿Quién pagará la factura? El regidor lo dejó bien claro: deben ser los promotores de casi unas 5.000 viviendas en el distrito de Campanillas, algunas en zona inundable, que no podrán construirse hasta que no se culmine este proyecto. Una vez redactado, el mismo debe tener el visto bueno de la Junta, y del Ayuntamiento, y el alcalde también miró al Gobierno central, del que dijo depende el Plan Hidrológico Nacional (PHN). «Se está avanzando con los promotores, los números cuadran y hay voluntad de hacerlo (el encauzamiento). De hecho, fue taxativo cuando subrayó que no podrá haber suelo desarrollado urbanísticamente (sobre plano) sin el encauzamiento de este temible río »por nuestro respeto y consideración a los vecinos de Campanillas«, puntualizó. En este sentido, vino a decir que para cerrar el círculo hay que sumarle a la presa de Casasola, que subrayó es muy útil, el encauzamiento del río aguas abajo de la infraestructura.

El otro gran escollo en la defensa de Málaga contra las inundaciones está, a juicio, de De la Torre, en la presa de río Grande, del que dijo que hubo un momento en el día de ayer que había mucha preocupación en Cártama. No hay que olvidar que río Grande es afluente del río Guadalhorce junto a los ríos Turón y Guadalteba, por lo que acaban sumando sus caudales en la recta final y desembocan en Guadalmar, en Málaga. Ahí se refirió a que en 2011 quedaron proyectos por hacer en el polígono del Guadalhorce para defenderlo frente a las inundaciones porque el Ayuntamiento de Málaga tuvo que comprar Arraijanal para hacerlo parque tras desecharse como marina, «que era el proyecto del PSOE y de Cristina Narbona», puntualizó no sin cierta crítica.

Respecto a los arroyos de la zona Este, Jaboneros y La Caleta, el alcalde de Málaga subrayó que habían tenido muy buen comportamiento, pero que había que hacer un estudio de todas las cuencas de Málaga que vierten al mar, y en esta línea también dijo que habría que hacerlo del Guadalmedina, respecto a los puentes plaza que hay proyectados, y que éste último correría de la mano de Urbanismo o Promálaga.

En cuanto a los daños que se habían producido en la ciudad tras las inundaciones, De la Torre subrayó que deben venir ayudas del decreto del Gobierno, que ahora se ampliará a Málaga, y de la Junta, y que también eran factibles subvenciones europeas, y respecto a cuantificar los daños subrayó que aún no estaban valorados, pero que no había habido muchos daños en las infraestructuras municipales a priori aunque sí problemas con muros en el Camino Nuevo y ciertos problemas en Emasa, así como que habían vuelto las goteras al Museo Ruso, donde «se harán las reparaciones necesarias» y que se estaba evaluando si se habían visto afectados colegios, cuyo mantenimiento es competencia municipal.

De la Calle Carretería, cuya obra está recién terminada, y que ayer vivió un colapso con la rotura del colector de Andrés Pérez, De la Torre subrayó que había que estudiarlo para, en su caso, hacer una obra complementaria. Indicó que debajo de la calle Carretería hay un arroyo y que había un proyecto, del que sabe que no se culminó del todo. La rueda de prensa, en el salón de los Espejos, contaba con el seguimiento de todos los concejales del equipo de gobierno del PP, que escuchaban la explicación del alcalde, que les dio las gracias por su trabajo y colaboración en el día de ayer durante la alerta roja y el paso de la DANA por Málaga.

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