Un nuevo pleito complica aún más el desarrollo de los terrenos de Repsol en Málaga

La multinacional ha interpuesto un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra la aprobación definitiva de la modificación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) formalizada por el Pleno de la Corporación el pasado 30 de marzo para cambiar el uso (de sistema técnico a zona verde pública) de un pastilla de 3.556 metros cuadrados en la confluencia de las avenidas de Europa y Juan XXIII donde Repsol tenía los derechos para una estación de servicio y que fue suprimida por el Consistorio para ganarle terreno al futuro parque contemplado en el proyecto residencial de las torres pese a que ya tenía licencia de actividad y solicitada la de obras.

Este primer paso para cambiar la gasolinera de sitio se dio a comienzos de 2016 y se sumó a otro movimiento similar dado a finales de 2015 para anular la tramitación administrativa de otra estación de servicio prevista en Sacaba Beach ante el rechazo de los vecinos. La compañía española aceptó la propuesta del Ayuntamiento, pero a cambio de trasladar los derechos de estas dos nuevas gasolineras a otro emplazamiento de la ciudad. La predisposición por ambas partes siempre ha sido buena.

Pero la realidad es que siete años y medio después aún no se ha llegado a un acuerdo ante la dificultad de encajar en los planos dos emplazamientos alternativos que satisfagan a la empresa y, a su vez, no generen rechazo vecinal. Una de las últimas opciones que se contemplaron fue Colinas del Limonar, aunque no convenció a la petrolera. De esta forma, como alternativa se planteó compensar a la multinacional prorrogando los años de concesiones en varias de las estaciones que gestiona en la capital, aunque tampoco ha terminado de prosperar.

Pese a ello, la Gerencia Municipal de Urbanismo inició de oficio en 2020 el expediente para el cambio urbanístico que teñiría de verde esta pastilla de suelo reservada para estación de servicio en una de las esquinas de estos terrenos que hasta hace dos décadas albergaron los depósitos de hidrocarburos. Un procedimiento que se completó el pasado 30 de marzo con la aprobación definitiva por parte del Pleno. Sin embargo, el asunto se enreda ahora con la interposición del citado recurso judicial.

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Y no es el único que trastoca los planes municipales para desarrollar este sector donde están previstas cuatro torres de hasta 34 plantas (la cuarta y más alta es de la Sareb) para viviendas y oficinas, además de dos edificios de oficinas, otros cuatro para 400 VPO y un gran parque. Como ya informó SUR este lunes, aunque la venta de los terrenos para tres torres y los dos inmuebles para oficinas ha sido adjudicada a Urbania por 54,9 millones de euros (66,4 con el IVA), los servicios jurídicos de Urbanismo advierten de que las obras no podrán comenzar hasta que no haya sentencia firme sobre el recurso contencioso-administrativo presentado en junio de 2022 por Bosque Urbano Málaga, la plataforma ciudadana que lleva siete años defendiendo que la totalidad del suelo que hasta hace dos décadas albergaron los depósitos de hidrocarburos se destinen íntegramente a una gran zona verde.