Una empresa de videojuegos ocupará el edificio de la nueva Mundial en Málaga

La empresa va a desembarcar en este céntrico edificio, que desde su reciente construcción ha permanecido desocupado, en virtud de un contrato de alquiler de larga duración, ya que el inmueble es propiedad del grupo promotor que ha liderado la construcción del hotel y otros dos inmuebles cerca del mercado de Atarazanas. Los empleados dispondrán también de un número de plazas de aparcamiento en el 'parking' subterráneo que existe bajo la parcela.

De esta forma, el entorno, antaño degradado, junto al Guadalmedina, será a principios de 2023 el centro de trabajo de unos 60 jóvenes, en su mayoría programadores e informáticos, aunque se espera que puedan llegar hasta un centenar. Los trabajos de reforma interior contemplan amplias zonas de trabajo, salones para reuniones y videoconferencias y el equipamiento de confort necesario (aire acondicionado, etc).

Los trabajos ya han empezado y tienen un plazo previsto de tres meses, por lo que hacia el mes de marzo del año que viene se prevé que pueda comenzar la mudanza. Además de trabajadores de Málaga, la empresa traerá a técnicos de otras ciudades y países, y para facilitarles el aterrizaje se ha alcanzado un acuerdo con el hotel para que puedan hospedarse hasta que encuentren una vivienda.

De este modo, una nueva empresa tecnológica pone el foco en el Centro de Málaga, y se suma al desembarco que ya está en marcha de Google (junto al Puerto), Vodafone y otras muchas. Además, según las fuentes consultadas, el pequeño edificio junto a la nueva Mundial y al hotel de Moneo, en la cara que da directamente al Guadalmedina, también está teniendo mucha demanda para convertirlo en oficinas por parte de empresas tecnológicas, por lo que este será previsiblemente su destino más factible.

A finales de julio pasado se dieron por terminadas las obras para transformar la zona de Hoyo de Esparteros y se abrió al público el hotel H10 de cuatro estrellas, diseñado por el arquitecto Rafael Moneo, junto a otros dos edificios, entre ellos, la reproducción de La Mundial, que ahora se confirma que estarán destinados para oficinas, ante la fuerte demanda de espacio para trabajar en el Centro de la capital.

Los elementos más característicos de la antigua pensión, los herrajes de los balcones, se han recuperado tras su restauración por parte de la empresa Quibla. Desde que se retiraron los andamios fueron varias las empresas que se interesaron por establecer allí sus oficinas, como finalmente ha ocurrido.