La suspensión cautelar de los artículos de la Ordenanza de Movilidad de Málaga relativos a la prohibición de las bicicletas de ir por las aceras y zonas peatonales dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) no altera la forma de actuar del Ayuntamiento de la capital respecto a la movilidad urbana. Mientras la jueces no digan lo contrario, y a falta de una red completa de carriles bici, se mantiene la obligatoriedad de los ciclistas de desplazarse por la carretera (o en los carriles 30 allí donde estén habilitados) compartiendo calzada con coches, motos y camiones. Por tanto, la Policía Local seguirá vigilando y denunciando a quienes se muevan en bici o en patinete por espacios peatonales.
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La única diferencia es que en lugar de argumentar la infracción en base a los artículos 23 y 24 de la norma municipal lo hará a través del Reglamento General de Circulación, que es de rango superior y que en su artículo 121 establece que «la circulación de toda clase de vehículos en ningún caso deberá efectuarse por las aceras y demás zonas peatonales». ¿Es la bici un vehículo? Para el Ayuntamiento, sí. La Ley de Tráfico define vehículo como un «aparato apto para circular» y denomina a los ciclos como «vehículo provisto de, al menos, dos ruedas y propulsado exclusiva o principalmente por la energía muscular de la persona o personas que están sobre el vehículo, en particular por medio de pedales». En base a este argumentario, la postura municipal es contundente: «En la práctica no va a cambiar nada. Vamos a mantener la prohibición. No pretendemos multar, pero hay una norma estatal que debemos respetar», afirma el concejal de Movilidad, José del Río, quien asegura que para despejar «las dudas generadas tras el auto judicial» la labor policial durante los próximos días va a ser «más didáctica e informativa» para explicar a los usuarios que esta prohibición sigue en vigor.
En este sentido, el edil ha aprovechado este lunes su participación en unas jornadas sobre Seguridad Vial en Madrid para reclamar tanto a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) como a la DGT un mensaje claro en el que "se traslade la importancia de respetar las normas estatales". Una petición a la que el director general de Tráfico, Pere Navarro, contestó afirmando que "hay que ir con la FEMP, la DGT está con vosotros". "Hemos de ir de alguna manera a hacer un bloque para evitar sorpresas como ésta, que nos dejan a todos un poco desconcertados y desorientados cuando son temas que están muy hablados, muy debatidos, muy estudiados y muy documentados".
Por lo demás, el edil insiste en que la ordenanza municipal «es una transposición» del Reglamento de Circulación y, por tanto, reitera la decisión de recurrir el auto de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJA en el que, sin entrar en el fondo del asunto en litigio, sí que ordena la suspensión de parte de la ordenanza hasta que haya sentencia. En el documento, los magistrados fundamentan su postura considerando que «el hecho de desplazar las bicicletas a la calzada evidencia una situación de riesgo objetivo de los conductores de estos vehículos, que están en absoluta desventaja con los vehículos de motor, lo que provoca un elevado riesgo de accidente». En relación a los carriles con limitación de velocidad de 30 km/h y de preferencia para bicis y patinetes, también expone que «se trata a su vez de un carril compartido con vehículos a motor, incluido el tráfico pesado, sin mas elementos de protección, poniendo en grave peligro la seguridad del tráfico vial, materia ésta que por su trascendencia incide en la vida e integridad física de las personas».
Por su parte, desde Ruedas Redondas insisten en invitar al equipo de gobierno a la reflexión. «Nosotros no queremos circular por las aceras, sólo por zonas peatonales por dónde siempre se ha transitado y como permiten otras ciudades como Barcelona mientras aquí ahora es imposible sin ser multado», expone su presidente, José Luis Martín.
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En este sentido, Del Río asegura que las sanciones «están para el imprudente y el que hace un uso desproporcionado, no para las familias». Sobre estos últimos, el responsable del Área de Movilidad explica la diferencia entre circular o pasear con menores: «si un niño va con su bici y sus padres van caminando se considera paseo y se puede ir por espacios peatonales, pero no si todos van en bici». Sobre esta cuestión, el equipo de gobierno (PP y Cs) han tumbado en la comisión de Movilidad de este lunes la moción del PSOE pidiendo que se permita a los padres de menores de 12 años acompañar en bicicleta a sus hijos por la acera cuando no haya una alternativa segura. «Lanzarlos a la carretera a convivir con el tráfico pesado es descabellado, cruel e inmoral», ha criticado el concejal socialista, Jorge Quero.
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