El Ayuntamiento comienza a retirar los candados de los pisos turísticos

«Hemos comenzado a quitar estas cajas en todas las estructuras que forman parte de la vía pública», confirmó a SUR el concejal de Seguridad, Avelino Barrionuevo. Aunque también advierte de que el Ayuntamiento no puede actuar cuando estos candados están anclados en rejas o fachadas de los bloques de pisos particulares. «En este caso, son las comunidades de propietarios quienes tienen que resolver si se permite o no», precisó.

En todo caso, aunque la Policía Local se está encargando de notificar la existencia de estos candados, el Ayuntamiento también rastrea los avisos que le llegan por parte de los ciudadanos. Preguntado por las actas que se han levantado para retirar estos candados, las fuentes consultadas del Ayuntamiento no han podido precisar aún un número exacto.

El concejal de Turismo, Jacobo Florido, también ratificó a SUR la retirada de estos candados por parte de servicios operativos. Además, aseguró que el anuncio por parte del Ayuntamiento de ir en contra de estos dispositivos que hagan uso de elementos de la vía público habría tenido un efecto disuasorio. «En muchos lugares donde estaban estos candados hemos visto luego que ya se habían retirado por parte de los dueños», señaló.

El Ayuntamiento anunció el pasado 25 de abril que quería acotar esta práctica asociada a la explotación de viviendas turísticas. Este tipo de dispositivos sirven para que los arrendadores no tengan que estar presentes en el momento de realizar el 'check in'. Las cajas aguardan las llaves que dan entrada a la vivienda y al huésped se le facilita el código del candado para realizar su apertura.

Esta práctica, más allá de las dudas estéticas, no contaba con el visto bueno de la Asociación de Viviendas Turísticas de Andalucía. La patronal advertía de la poca seguridad que ofrecen tanto a arrendadores como a huéspedes y defendía, a su vez, el uso de dispositivos electrónicos que son menos invasivos y que ofrecen más garantías.

El operativo que se ha articulado para retirar estos candados se mantiene activo. Aunque no signifique el fin de estos dispositivos en el imaginario de la ciudad, sí se espera que se reduzca de manera notable la cantidad de estas cajas de las calles.