De la Torre quiere iniciar las obras del gran túnel Litoral antes del final de su mandato

Acompañado de los responsables de este primer proyecto, el ingeniero José Alba y el arquitecto Salvador Moreno Peralta, ha valorado las actuaciones necesarias para soterrar los más de 2.200 metros entre el Muelle de Heredia y la Malagueta en unos 277 millones de euros y ha confiado en obtener financiación tanto de Europa (a través de los fondos FEDER) como de otras administraciones locales (Diputación Provincial, Junta de Andalucía e incluso Puerto de Málaga). 

Los responsables de este primer estudio valoran que aún quedan al menos dos años de estudios previos y que una vez determinada la viabilidad definitiva de la actuación se desarrollaría el proyecto. Como ya avanzó este periódico, la intención municipal es soterrar todo el eje litoral desde el Guadalmedina hasta el paseo marítimo Pablo Ruiz Picasso. Para ello se crearían dos túneles desde el hotel Miramar hasta el Guadalmedina bajo la avenida de Cánovas, paseo de los Curas y avenida Manuel Agustín Heredia, y se crearían nuevas estaciones de autobuses soterradas.

Tanto Alba como Moreno Peralta han considerado que parte del proyecto también podría ser autofinanciado estableciendo un canon a los autobuses que utilicen la estación intermodal y mediante la construcción de nuevas plazas de aparcamiento subterráneas. Esta actuación permitiría duplicar el espacio verde que hay en el Parque, mejorar las conexiones este-oeste, la unión de la ciudad con el Puerto y crear un paseo marítimo único y continuo. Del mismo modo han vaticinado que el soterramiento del tráfico permitiría recuperar el uso ciudadano entre La Malagueta, sobre todo en el espacio comprendido entre la calle Gutemberg y la Farola.

De llevarse a cabo este proyecto tal y como está planteado en la actualidad, la avenida de Manuel Agustín Heredia y su entorno sólo tendría tráfico de vecinos y transporte público; la avenida de Cánovas del Castillo se quedaría sin nada de tráfico, y los paseos marítimos dispondrían de un carril para permitir el acceso a los vecinos y la actividad hostelera. Además, desde el túnel se podría acceder a los diferentes aparcamientos.

Moreno Peralta ha explicado que este nuevo estudio parte de un encargo realizado por la Empresa Malagueña de Transportes (EMT) y que ha servido para comprobar que la red de autobuses urbanos de la ciudad es excelente, aunque las terminales no están a la altura del servicio que se ofrece. Por ello entiende que la clave pasa por crear un intercambiador en la plaza de la Marina para mejorar las conexiones metropolitanas y un nuevo parking soterrado en el Puerto. Igualmente se sustituiría la actual estación de autobuses del paseo de los Tilos por otra soterrada interconectada con la estación María Zambrano.

El alcalde ha expuesto que todo este proyecto nace con la intención de «mejorar la conectividad peatonal de Málaga y que la ciudad esté a la altura de los objetivos de Desarrollo Sostenible». En definitiva, que se puedan integrar todos los tipos de transporte, desde los autobuses hasta las bicicletas o patinetes, «haciendo una ciudad más humana, habitable y cómoda».

Ahondando sobre el aspecto de la financiación, De la Torre, ha dicho que están en disposición de encargar nuevos estudios este mismo año (pese a no contar con una partida concreta en los presupuestos) y que en las cuentas del año 2020 se incluirá una cantidad a determinar para seguir avanzando en este asunto. «No son obras que se vayan a desarrollar de forma inmediata, pero hay que seguir avanzando mucho en los estudios para determinar de qué forma se puede hacer». 

A este respecto, los vecinos presentes durante la presentación han reclamado al alcalde que no se inicien las obras hasta que se sea plenamente consciente de su viabilidad para reducir al máximo posible el impacto en los vecindarios y comercios, sobre todo en el entorno de La Malagueta. En esta línea han recordado los problemas que se han vivido en otras zonas de la ciudad como Callejones del Perchel o Carretera de Cádiz. «En esta zona no nos vamos a encontrar restos arqueológicos porque son terrenos ganados al mar», les ha querido tranquilizar De la Torre.