El BCE será crítico con el impuesto a la banca si detecta riesgo para el crédito

El organismo prepara su opinión sobre el gravamen con el foco en el diseño de las bases imponibles y el impacto en la solvencia del sector

Domingo, 24 de noviembre 2024, 00:04

El Banco Central Europeo (BCE)hará público en las próximas semanas su dictamen sobre el impuesto a la banca que el pasado jueves logró luz verde del Congreso, dentro del paquete de medidas fiscales del Gobierno. Ylo hará tras un minucioso análisis de esta ... nueva figura que, dentro de la institución, genera cierta incertidumbre por su diseño.

Publicidad

El propio vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, aseguraba esta semana desconocer el detalle del tributo. Pero advirtió que la clave en la decisión de la institución estará en que su impacto no modifique las decisiones comerciales de los bancos. Es decir, que sea «neutral» con los distintos negocios del sector y no afecte a la concesión de crédito. Una idea en la que también insisten desde el Banco de España.

El gobernador, José Luis Escrivá, explicaba hace unos días cómo, por ejemplo, la financiación a pymes aporta más al margen de intermediación (que es lo que grava el impuesto); y al ser un negocio de mayor riesgo, los bancos también deben provisionar más. Por eso, aboga por descontar (netear) las provisiones del gravamen. Es decir, deducirlas de la base imponible para evitar perjudicar este tipo de negocios.

Progresividad

«Hay que ser muy cuidadoso con la progresividad», indican fuentes del sector, en referencia a una figura que va a pasar de ser igual para todos los bancos afectados hasta ahora, a contar con una escala, con un tipo impositivo que oscilará entre el 1%y el 7% para aquellas entidades cuyo margen de interés supere los 5.000 millones de euros.

Publicidad

Según los resultados actuales, en el tramo más elevado se situarían gigantes como Santander, BBVA y CaixaBank, cuyo consejero delegado, Gonzalo Gortázar, llegó a calificar la figura de 'Tasa CaixaBanK' al considerarse la más perjudicada. Todo tras haber pagado ya más de 850 millones en los dos últimos años con el impuesto temporal. Sabadell sería el siguiente en el listado, aunque caería al tramo del 6% a la espera de los detalles del diseño.

Las patronales del sector, AEB y CECA, han alertado ya de la inseguridad jurídica que genera una medida «que se ha gestado en un proceso caótico y poco transparente», reiterando que restará 50.000 millones de euros en nueva financiación para familias y empresas. Aunque ningún banco ha confirmado estas cifras –de forma individual, mantienen buenas previsiones de crecimiento del crédito– al BCE también le preocupa este punto. Y no solo eso. El organismo central también vigilará de cerca el impacto del gravamen en la solvencia de las entidades antes de emitir su veredicto.

Publicidad

A pesar de que este juicio no resulta vinculante, sí puede servir de base para las presiones del sector sobre el diseño de una figura que asumen que acabarán pagando, por lo que intentarán que tenga el menor impacto posible.

Ya en su anterior pronunciamiento sobre el impuesto temporal –que algunas entidades recurrieron ante la justicia– , el BCE advertía de los riesgos que, tanto en España como en otros países, generan este tipo de tributos. Ys olicitó al Ejecutivo un «análisis exhaustivo» de las posibles consecuencias negativas para la rentabilidad de la banca y, sobre todo, para las condiciones de competencia que se generarían en el mercado. Es decir, el BCE advertía del riesgo de que los clientes acabaran siendo los principales perjudicados si las entidades empezaban a trasladar el coste del tributo.

Publicidad

Respuesta tardía

A la espera de esta valoración, el sector cuenta ya con la de la Federación Bancaria Europea, muy crítica con este tipo de medidas. En un comunicado publicado hace unos días, la patronal lamenta que estas tasas adicionales se hayan convertido en una «herramienta política crónica» en vez de primar las necesidades de financiación para la economía en una región que ahora requiere de grandes inversiones para avanzar en competitividad.

«Mientras organismos internacionales como el FMIo el BCE insisten en reforzar la solvencia y las capacidades de los bancos, estos impuestos adicionales suponen un lastre para la concesión de créditos», añade la asociación. Una respuesta, no obstante, que llegaba apenas unas horas antes de que el tributo fuese aprobado en el Congreso.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad