Ignacio González: «Alberto quiere ser uno de los grandes»

Quien más le conoce y le ha visto progresar es su padre, que hizo las veces de entrenador hasta el pasado 2023, cuando Alberto ya entró a formar parte del programa de entrenamientos de la selección española. Su progenitor, que en sus tiempos también fue triatleta –pero a un menor nivel–, rebosa orgullo: «Estamos emocionados y disfrutando mucho de esta oportunidad de verle en un Campeonato de Mundo aquí. Alberto tiene la tranquilidad de controlar el circuito, hacer sus rutinas en casa… Está disfrutándolo mucho».

Este domingo, a partir de las 17.00 horas, será la final masculina Élite de las Series Mundiales, que por primera vez recalan en la provincia, en Torremolinos. La prueba reina del campeonato, en la que el campeón olímpico, el británico Alex Yee, parte como el gran favorito, ya que cuenta con una importante ventaja en el 'ranking' general con respecto a sus dos inmediatos rivales: 428 puntos sobre el francés Léo Bergere (bronce olímpico) y 524 respecto al neozelandés Hayden Wilde (plata olímpica), de manera que un sexto puesto le valdría para proclamarse campeón.

Liderando el equipo español, no con opciones de podio en la general, pero sí con opciones de ser medallista en esta prueba, está Alberto. «Está siendo todo tan perfecto que… Sé que va a estar en cabeza, peleando y dando juego. No sé las circunstancias que se darán en la carrera, porque luego pasan muchas cosas y se hacen grupos…», valora su padre sobre lo que podría suceder esta tarde. «Es cambiante el podio en las Series Mundiales. Están los favoritos y luego puede haber un tercero que dé el pelotazo, y él puede ser uno de ellos», añadió.

Confía plenamente en el potencial de su hijo porque, como decíamos, ha vivido el proceso en primera persona. Por ello, no le asombra lo que está consiguiendo: «No lo vivo con incredulidad, pero sí con la sorpresa por el salto que ha dado. Llevamos muchos años trabajando para ello y se confirma que todo lo que ha ido haciendo, toda esa preparación, y el cambio con el proyecto de la selección española. Lo estoy disfrutando muchísimo. Sabía que era un talento. Ya destacaba desde cadete y sabíamos que eso iba a salir por algún lado. Ahora, en el mejor momento y escenario, es donde lo puede refrendar. Estoy orgullosísimo de lo que ha hecho y de lo que nos queda por vivir cada día».

Asegura, además, Ignacio que hubo un antes y un después tras el diploma olímpico en París, pero más aún tras el espectacular cuarto puesto en Weihai, la mejor posición de un español desde 2022. «Ahora dice: 'ahora estoy aquí, me veo peleando con los grandes y voy a ser uno de ellos'», sentencia.