Un espontáneo con suerte en La Rosaleda: se abraza con jugadores de la selección y Unai Simón le firma sus guantes

Estuvo muy cerca de fracasar, pero cuando iba a ser evacuado por el personal de seguridad que lo interceptó antes de llegar al centro del campo donde estaba la selección, los jugadores de La Roja lo impidieron. Detuvieron la maniobra e hicieron posible que este jovencísimo aficionado pudiera cumplir el deseo de estar cerca de las estrellas del fútbol español. Se abrazó con Sarabia, uno de los goleadores del encuentro, y luego se fue en busca del portero, Unai Simón.

Del portero del Athletic consiguió además que le firmase uno de sus guantes. Los que usó para salvar a España en los primeros minutos del choque con dos paradas muy complicadas ante la República Checa. Una de ellas fue un mano a mano que solventó con contudencia, reafirmando su rol de titular en esta selección. De ahí también el reconocimiento del niño espontáneo, que se fue directo a por él en cuanto se lo permitieron. Estaba emocionado y aprovechó su momento.

Tanto que casi se une al resto de la selección en su vuelta de honor a La Rosaleda para agradecer el apoyo de toda la grada, donde también siguieron de cerca, con curiosidad, la aventura del pequeño seguidor que había saltado al césped. Hubo aplausos a la jugada por la reacción de los futbolistas de ser flexibles con las normas de seguridad en este caso concreto. Ellos lograron que este intrépido aficionado se guarde para siempre un momento de máxima felicidad y que seguramente nunca olvidará.

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