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Luis Enrique dio protagonismo a la afición de Málaga en la victoria de la selección española sobre República Checa. El entrenador asturiano destacó el comportamiento de La Rosaleda y la usó como ejemplo de lo que para él debería ser el ambiente que envuelva al ... equipo nacional.«Felicito a la afición de Málaga, porque nos ha ayudado mucho. Y una cosa que me gustó es que se respetó al rival y no se pitó el himno del otro país. Ahí han estado soberbios y me gustaría que fuera así en más campos [..] Cuando estábamos sufriendo por la presión han estado con nosotros y es muy importante. Ojalá sea siempre así. Ha sido una muy buena noche», destacó.
El seleccionador desea que esta corriente de ilusión que sintió en Málaga se extienda. «En Málaga, los que han venido y compraron las entradas en una hora, quieren ilusión. La afición ha estado soberbia desde que llegamos al hotel. Si se suman más sería genial. Para nosotros es mucho mejor jugar así. La vuelta al campo para agradecer a la afición fue totalmente improvisado, pero si se convierte en algo habitual sería extraordinario», comentó antes de mostrar su contento con la actuación de su equipo. «Cómo no voy a estar satisfecho. Nos vamos líderes, hemos estado bien en los cuatro partidos en general y hemos podido repartir minutos. El partido lo podíamos haber acabado en la primera parte, pero en general ha sido luchado y complicado, porque el rival es un gran equipo», analizó.
Con este triunfo y el liderato, gracias a la derrota de Portugal en Suiza, Luis Enrique da por cerrado el último capítulo de dudas sobre su selección tras no convencer en algunos de los últimos encuentros en la Liga de las Naciones. «Os animo a preguntarles los rivales lo que sienten cuando juegan contra nosotros. Preguntarles a ellos si estamos entre los candidatos. Lo digo desde la humildad porque todavía no hemos ganado nada con este equipo. Pero vamos a competir y eso es indudable», espetó en la sala de prensa de La Rosaleda, uno de los últimos escenarios donde se irá perfilando la convocatoria para el próximo Mundial de Catar que se celebra entre noviembre y diciembre.
«Tengo un grupo de 45 o 50 jugadores, y ahora llega una época donde analizar mucho y esperar a septiembre para meternos en la 'final four' de la Liga de las Naciones. Después de eso ya pensaremos en el Mundial», resumió. También dio relevancia al hecho de haber sacado adelante su plan de repartir minutos de juego para sobrellevar la carga de partidos (cuatro en apenas diez días) que coincide con el final de la temporada futbolística. «Hemos tenido en cuenta que debíamos repartir minutos y en función de los roles que necesitaríamos contra los rivales a los que nos hemos enfrentados. Y nos han dado lo que necesitábamos. Tengo que hacer un balance muy positivo. Ahora se van de vacaciones, que ya tenían ganas», concluyó.
Entre los nombres propios por los que fue preguntado destacó su reflexión sobre Marcos Asensio, quien fue asistente en el gol de Carlos Soler con una jugada de calidad en el control y el regate. «Es un caso que siempre que ha jugado en su club y ha estado a disposición lo he convocado. Nos gusta, y él lo sabe. Tiene clarísimo lo que le pedimos. Su hándicap es que hay otros jugadores que ahora no han sido convocados que aportan cosas parecidas. Yo, encantado de que se vayan más jugadores. Rodri, Íñigo Martínez y Eric García han estado soberbios. A ver si hoy alguien lo destaca», finalizó Luis Enrique en su visita a Málaga.
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