Luc Roux, el fotógrafo de confianza de las estrellas del cine francés, expone en Málaga

En 'Le Cinéma Au Cœur', Luc Roux muestra por primera vez en España la esencia de su 30 años como gráfico en las míticas revistas 'Studio Magazine' y 'Première', publicaciones que él fundó junto a Marc Esposito y Jean-Pierre Lavoignat, comisario de esta exposición. Durante los años 80, 90 y hasta 2016, su cámara se ha colado en el rodaje de películas como 'Sous le soleil de Satan' (Palma de Oro en Cannes) con una impactante instantánea de Sandrine Bonnaire ensangrentada o 'Evita', donde hace un guiño a Málaga con una fotografía de Antonio Banderas. «Fue muy amable», mucho más que Madonna, puntualizó Luc Roux en la presentación, a la que acudió el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre.

Pero las fotografías más potentes de Luc Roux están fuera de los platós, en encuentros casuales o buscados con los grandes nombres de la cinematografía gala. Si ningún retoque ni artificio. Cada una de las 40 instantáneas que cuelgan de las paredes de la nueva sede de la Alianza (calle Canales, 11) esconde una historia detrás. La de Charlotte Gainsbourg cruzando una avenida de Nueva York fue casi un golpe de suerte. Voló hasta allí en Concorde (una «oportunidad» que recordó con una sonrisa) para retratar a Isabelle Adjani y esperando en el hall del hotel vio a Charlotte. Pasó una tarde entera con ella en la Gran Manzana, y de ahí salió esa imagen de la actriz entre los rascacielos.

Premonitoria resulta la fotografía de Marion Cotillard y Guillaume Canet: la revista buscaba en 2001 a dos jóvenes actores en la cuerda floja y aquí aparecen ambos atados a una soga. Años después, acabarían casándose. En un festival de Cannes, Fanny Ardant le puso una condición: se dejaba fotografiar pero sin que se viera que era ella. Aceptó el desafío y el resultado es un bello contraluz, en un muelle justo enfrente de su hotel. «Le encantó, era muy mágico», apuntó Lavoignat. Porque como añadió, los actores «están cansados» del posa aquí y mira allí. «Y yo no quería eso que siempre les piden, porque quita la naturalidad», añadió Roux.

La «verdad» es su máxima. La hay en la imagen de Gérard Depardieu descansando tras una intensa jornada de presentación en la villa que 'Studio Magazine' alquilaba cada año para alojar al equipo que cubría el evento. O en la de Jean-Paul Belmondo, entre los decorados de un rodaje. Precisamente a este actor, recientemente fallecido, dedica un homenaje el 27 Festival de Cine Francés de Málaga. 'Le Cinéma Au Cœur', que podrá visitarse hasta el 15 de diciembre, sirve de antesala a este encuentro con lo mejor de la cinematografía francesa actual, que se celebra del 15 al 22 de octubre en distintos puntos de la ciudad.