

Secciones
Servicios
Destacamos
CRISTINA PINTO / CLAUDIA SAN MARTÍN
Domingo, 10 de julio 2022, 01:42
Han sido cuatro los días de fiesta de este fin de semana en Torre del Mar por la vuelta del Weekend Beach Festival a su recinto. Saltos, bailes y muchas sonrisas se han podido ver en estos días donde los 'weekers' –como se les llama a los incondicionales de este festival– se han dejado el alma en cada concierto. Son unas 40.000 personas las que se esperaban y las cifras parecen haberse cumplido en este primer reencuentro de la cita musical torreña tras la crisis y el parón provocado por el Covid-19. Había ganas de esta vuelta del Weekend Beach y los cuerpos lo sabían. De hecho, no dejaron de bailar con los conciertos tan esperados como La Pegatina, Residente, SFDK, Rozalén, Antílopez, M-Clan, El Canijo de Jerez o Guitarricadelafuente, entre la gran lista de citas que ofertaba cada tarde y noche el festival. O con el techno, que hasta altas horas de la madrugada intentaba dejar saciados a los más fiesteros que luego seguían buscando continuar la fiesta en el camping.
El Weekend Beach de los reencuentros, mientras vivía su última noche ayer, tuvo movimientos de última hora en los horarios. El sábado siempre es el día más multitudinario de todos y en esta edición siguió siéndolo con artistas como Nicky Jam, Lola Índigo, Juanito Makandé, Izal, Rels B o Kase O. Mientras el concierto de reguetón de Nicky Jam estaba propuesto para las 22.00 horas, a mitad de la tarde la organización lanzaba el mensaje de un cambio de horario a las 1.45 horas. Algo que a muchos alegró: «Prefiero que sea más tarde», decía Miguel desde el camping. También el concierto de Izal cambió su hora, que se adelantó unos quince minutos en su horario establecido. A las 23.45 horas la banda daba uno de sus últimos conciertos de la gira, con la que anunciaron su separación tras más de diez años juntos sobre los escenarios.
Gente para llenar cada concierto, miles de caras que volvieron a alumbrar cada actuación con sus móviles y otros que lo hacían desde su trabajo detrás y dentro del escenario, que son cientos de personas durante cada jornada. Hubo primeras veces de 'weekers' y había otras que ya eran más que veteranas.
Y siempre ganas, de eso no falta en el Weekend Beach, el festival de las miles y miles de caras y a las que SUR ha querido ponerles nombre y apellido a algunos de los rostros de esta edición. No están todos pero sí que están representados con un punto en común: la emoción por ser 'weeker'.
Raquel Gil. Primera vez en el Weekend
Las primeras veces siempre son especiales y así lo ha sido en este festival para Raquel Gil, que llegaba directa desde Alozaina gracias a su amiga que le había regalado la entrada: «Esto es todo por mi amiga», resaltaba la joven de 25 años durante una de las tardes del Weekend Beach.
–¿Había estado antes en algún festival?
–No, es en todo mi primera vez.
–¿Nunca había pensado en ir a alguno?
–Lo tenía pendiente, pero la verdad es que al final nunca me surgía la oportunidad. Ahora me lo ha regalado mi amiga Eva, que somos amigas desde pequeñas.
–¿Qué es lo que más ilusión le hace?
–Ver a Residente y al Canijo de Jerez, son mis favoritos aquí.
–¿Cómo está siendo el ambiente?
–Muy guay, además está todo bien localizado.
–¿Le gusta la parte de la electrónica?
–Sí, de las primeras cosas que pregunté fue que cuándo abría ese escenario. Me gusta mucho ese tipo de música. ¡En realidad era muy festivalera y no lo sabía!
Fátima Rodríguez. Directora artística de contratación
Entre concierto y concierto, entre los pasillos y la zona de camerinos se puede ver a Fátima Rodríguez sin parar de un lado a otro. Casi recién galardonada con el premio 'Wonder Women of Latin Music', celebra esta edición que vuelve después de la pandemia.
–¿Cómo es el trabajo desde detrás?
–Llevo desde 2014 y esto es como un parto para mí. Voy viendo crecer al Weekend y la verdad es que cuando acaba el festival siempre tratamos de escuchar las peticiones de los 'weekers'.
–¿Algún artista que se haya resistido?
–No, ninguno, aunque este año ha estado más complicada la contratación internacional.
–Tendrá anécdotas que contar.
–Cuando vino Damian Marley, lo encontraron viendo un concierto desde la valla antiavalancha.
–Lo más especial.
–Abrir las puertas y ver cómo los 'weekers' entran.
–Su hijo está por aquí decía, ¿no?
–Mis dos hijos llevan el Weekend 'pa'lante'. Pero al de 19 le está encantando el camping, es su primera vez.
El Canijo de Jerez. Cantante
Recién terminado de su concierto para el Weekend en la noche del viernes, El Canijo de Jerez deja un ratito para hablar con SUR lleno de adrenalina.
–Casi que no falla, como residente del Weekend.
–La verdad es que soy un veterano aquí. Cada vez que vengo hay una energía especial, no sé si será por las conchas finas, los espetos o los cielos tan inmensos que tenéis en Málaga. O el semáforo que han hecho de Chiquito de la Calzada, eso sí que es una buena noticia.
–¿Qué es lo mejor de aquí?
–El ambientito, también que es que estamos en una zona muy buena... Y que el cartel me parece muy grande con gente como mi hermano Juanito Makandé o Miguel Campello.
–Algo que le haya pasado y que casi que no se pueda contar.
–Mira, una vez, no sé si fue el segundo año que vine, con los nervios de cantar me entraron ganas de mis necesidades y lo hice detrás del escenario. Avisé al personal.
Gonçalo. Dj y contratación artística
Unas horas antes de subirse al escenario 'Sunrise Jack Daniel's', Gonçalo hace hueco entre los camerinos para hablar con SUR. Hace más de 20 años que trabaja como Dj y desde los inicios del Weekend Beach trabaja también en la parte de la contratación artística.
–Lleva aquí desde que nació Weekend.
–Llevo desde la primera edición de Weekend Beach, hago sobre todo la parte de electrónica y de banda internacional. A parte de artistas estoy en la parte de la contratación también.
–Vive las dos caras del festival.
–Pienso que para entender un festival hay que vivir ambas partes: como artista conozco las últimas tendencias, estoy muy actualizado con la música porque es parte de mi trabajo y eso me ayuda a la hora de confeccionar el cartel.
–¿Cuánto lleva como Dj?
–Más de 22 años pinchando. He sido músico de conservatorio muchos años y he tenido mis bandas de rock and roll de adolescente.
Álvaro Lafuente Guitarricadelafuente. Artista
Acababa de terminar un concierto muy visceral, con una química asombrosa con el público a pesar de entonar baladas. Subió a cantar al escenario a una de sus fans y enloqueció al Weekend.
–¿Lo había hecho antes?
–No, nunca había surgido. De hecho me dijo: «Voy a hacer armónicos», así que ha sido muy bonito.
–Ha defendido baladas en un festival, eso es muy difícil.
–Creo que he visto al público recíproco, mis baladas son aptas para este tipo de festival.
–No se siente fuera de lugar.
–No, aunque sean canciones melancólicas.
–Es su primera vez aquí.
–Estoy muy ilusionado, le tengo mucho cariño a Málaga. Siempre que vengo estoy muy a gusto y hoy me he bañado en la playa y he comido 'pescaíto'. El pack completo.
–¿Se siente aún impresionado por el cariño de su público?
–Es chocante, pero hay que agradecer que venga gente a los conciertos. Lo bonito es no acostumbrarse.
Antonio Arroyo. Camarero
Es el más veterano tras la barra del Weekend: siete años de arduo trabajo bajo los rayos de julio. Más allá del dinero, lo que más valora de estos días es estar con sus compañeros.
–¿Cuántos años lleva tras la barra?
–Desde que empezó, siete.
–¿Qué es lo mejor que se lleva del Weekend?
–Estar rodeado de buena gente, de buenos trabajadores. Los clientes suelen ser educados, no suele haber problemas ni peleas.
–¿Vale la pena estar trabajando más de 14 horas?
–Sí, tienes tus ratos de descanso y te meten en un piso que está a 500 metros con todos los compañeros. Yo soy de Granada, de Peñuelas. También monto escenarios y vallas en el festival.
–¿Lo ha echado de menos estos dos años?
–Claro, aquí te encuentras con gente de todos los sitios. Aquí no somos compañeros, somos como una familia porque compartes muchas cosas.
–¿Y el sueldo?
–Compensa, al final de semana cobras bastante bien.
Leyla Mattalia. Veterana en el Weekend
Leyla Mattalia acudía en su tercer año de Weekend con su amiga Laura. ¿La actitud?: «Este fin de semana nos comemos el mundo, aunque con precaución que el lunes volamos a Canarias».
–¿Cómo se duerme en el Weekend?
–Regular (risas), porque hay mucho tránsito, es normal, pero estás tan cansada, que no borracha (risas), que no te das cuenta.
–¿La mejor anécdota que recuerda?
–Conocer gente nueva, disfrutar el momento y escuchar a los cantantes que más te gustan. Disfrutar con tu gente es increíble.
–Estos dos veranos sin Weekend, ¿han sido tristes?
–Muchísimo, yo tenía muchas ganas de que hubiese fiesta y de vivir esto, son momentos espectaculares.
–¿Le gusta la variedad de estilos que hay?
–Sí, vas a integrarte porque hay de todo. Hay gente de todos los géneros con quien puedes congeniar muchísimo y ni te lo imaginas, con hippies, con heavys...
Gabriel Bauer, cantante de Bauer
El sol justiciero de las 19.00 horas no llenó la pista de baile cuando Bauer tocaba, pero los primeros valientes aportaron mucha calidad a su primer show en el Weekend.
–¿Esperan repetir?
–Ojalá que sí, me ha parecido muy guay y ha sido un honor total abrir el festival esta tarde. No importa si primeros, a la mitad o los últimos.
–¿Cómo les han tratado por aquí?
–Súper bien, la verdad. En el camerino todo excepcional, los técnicos tratándonos con mucho mimo y respeto. En el Weekend, el trato de los trabajadores es muy profesional.
-¿Y el público?
–Había poquita gente al ser los primeros, pero se nota que la gente tiene muchas ganas de festival después de todo lo que ha pasado.
–¿Y la vida de músico este verano de remontada?
–La vida de músico siempre es complicada y lo difícil ha sido después del parón retomar y gestionar los conciertos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Doménico Chiappe | Madrid
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.