La Junta invierte hoy en el Teatro Cánovas menos que hace diez años

Según datos obtenidos a través del servicio de acceso a la información pública de la Junta, la inversión del Gobierno andaluz en el teatro de El Ejido ha caído de forma progresiva en la última década con repuntes puntuales en 2015, 2018 y 2019. Subidas que, en ningún caso, alcanzaron la cifra de 2012. El desplome más significativo tuvo lugar en 2014, cuando el importe bajó por primera vez del millón de euros (972.000), un descenso que coincide con la conversión del Cánovas en teatro para la juventud y la infancia.

Desde ese momento, la línea de programación más vanguardista y arriesgada que siempre había liderado la Junta en este espacio desapareció de la agenda y se concentró en los otros dos teatros de gestión andaluza en la región: el Alhambra de Granada y, especialmente, el Central de Sevilla, la gran apuesta. Ahí están los números. El teatro de Sevilla es el único de los tres escenarios de la Junta que hoy recibe más dinero que hace diez años: de los 2,3 millones de 2012 a los 2,8 de esta temporada, más del doble del presupuesto actual del Cánovas. Ni siquiera sumando la partida destinada al Cánovas y al Alhambra se alcanzan los 2,8 millones del Central.

Las cifras corresponden a gastos ejecutados en programación, infraestructuras y personal. Si se cuenta el total invertido en los tres recintos desde 2012, la diferencia se hace más evidente. Desde entonces hasta ahora, el Central ha recibido 25,9 millones de euros frente a los 11,2 del Cánovas y los 12,2 del Alhambra. Si bien es cierto que el Central es un teatro de mayor envergadura (y por tanto con más coste), la caída de la inversión en la capital malagueña no se ha compensado con otro tipo de actividad teatral.

Cabe recordar que tras 2014, las obras experimentales de pequeño formato quedaron limitadas a la Sala B del Cánovas, la danza a la Gades y las revisiones de los clásicos encontraban una salida cada verano en el Teatro Romano. Pero los dos primeros espacios cerraron con la pandemia (y hasta hoy) y en 2018 el Romano salió de las programaciones teatrales por la necesidad de acometer unas obras que aún no se han ejecutado. En su lugar, la Junta sumó el año pasado Marenostrum Fuengirola a la ruta del ciclo Anfitrión (teatro en monumentos), pero resulta del todo insuficiente.

Cubrir ese vacío es lo que demanda la plataforma que pide instalar en el Convento de la Trinidad (de la Junta y en proceso de rehabilitación) un Centro Andaluz de Creación Contemporánea. La iniciativa, que cuenta con el apoyo de creadores, investigadores y organismos, ya ha superado las 700 firmas en change.org y logró el respaldo del Ayuntamiento con una moción institucional que, en cambio, no prosperó en el Parlamento andaluz. Un tema que hoy seguro se abordará en el III Congreso Provincial de Artes Escénicas que se celebra en el Centro MVA, el primero en una década.