Nuevo paso para la desaladora de la Axarquía: el Gobierno adjudica la supervisión del anteproyecto

Así, la sociedad pública estatal Acuamed, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, ha adjudicado a la consultora TPF Getinsa Euroestudios S. L. sendos contratos de servicios de ingeniería para la revisión de los anteproyectos redactados por los usuarios de las futuras plantas desaladoras previstas en el Bajo Almanzora de Almería y en la Axarquía. Lo hace tras conseguir esta firma la mayor puntuación frente a las otras dos que también presentaron sus ofertas al procedimiento activado a principios del pasado mes de enero. Las otras dos ofertas fueron las de Innovación Civil Española S. L. y S. G. S. Tecnos S. A.

El presupuesto de adjudicación para cada uno de los dos contratos es de 66.300 euros, más el IVA, lo que supone un total de 80.626,34 euros y el plazo de ejecución es de 18 meses. En ese tiempo, los técnicos de la firma adjudicataria tendrá que ajustar los estudios, proyectos e impactos ambientales e iniciar la salida a concurso del proyecto y las obras de la futura planta desaladora de la Axarquía, cuya ubicación exacta no está aún del todo definida, tras varios vaivenes y cambios en los últimos meses. No obstante, todo apunta a que será en el entorno de Las Campiñuelas, próximo al cauce del río Seco.

Las previsiones apuntan, por lo tanto, a finales de 2026 como fecha para que se pueda dar el siguiente hito burocrático, la licitación de la redacción del proyecto y la ejecución de las obras. El coste estimado de la actuación ronda los 100 millones de euros que adelantará el Gobierno y que luego devolverán los usuarios en un plazo de hasta 50 años con un periodo de carencia que hay que fijar.

«Sus objetivos son garantizar el abastecimiento de agua potable, contribuir a las necesidades de agua para riego y reducir la extracción de los acuíferos sobreexplotados en la Costa del Sol de la provincia de Málaga. Para ello se plantea la construcción de nueva desaladora de agua de mar en la comarca de la Axarquía malagueña de capacidad de producción inicial de 25 hm3/año y ampliable en otros 25 hm3/año», indica el documento técnico, analizado por SUR.

«Con el objeto de no demorar los plazos y desarrollar a la mayor brevedad estas nuevas infraestructuras, por parte de los futuros usuarios de las dos desaladoras se ha promovido y puesto en marcha la redacción del anteproyecto de cada una de las desaladoras y de los estudios de impacto ambiental asociados. De conformidad con éstos, Acuamed está supervisando la redacción de la documentación mencionada, con el objeto de que el contenido de la misma sea el adecuado para que pueda ser tramitada ante el MITERD una vez concluida esta redacción», prosigue el pliego.

Además de los anteproyectos, la empresa pública Axaragua, dependiente de la Mancomunidad Oriental y los regantes, que se han agrupado y constituido en entidad única (habrá 12,5 hectómetros cúbicos al año para riegos y otros tantos para abastecimiento urbano), aportarán los correspondientes estudios de impacto ambiental antes de iniciarse esta consultoría impulsada por Acuamed.

Se trata, en suma, de revisar por parte del Gobierno central que todo encaja, técnica, ambiental y jurídicamente para poner en marcha la fase de licitación del proyecto y la ejecución de las obras. Y, sobre todo, detectar fallos a tiempo para evitar demoras en fases posteriores. Se incluyen cuestiones ambientales, presupuestarias, funcionales, hipótesis de cálculo, geotecnia y de seguridad y salud.

La empresa ganadora del concurso, la consultora TPF Getinsa Euroestudios S. L., es, por lo tanto, la encargada de la revisión del anteproyecto/proyecto y del estudio de impacto ambiental. «Es por ello que el adjudicatario del presente contrato deberá preparar un informe definitivo de los anteproyectos, con el fin de que toda la documentación esté completa y claramente definida para la licitación de los contratos de proyecto constructivo y obra. Por tanto, el plazo total se estima en 18 meses, el cual ha sido estimado teniendo en cuenta los tiempos necesarios para adaptar, mejorar, modificar los anteproyectos, una vez revisados por el consultor y Acuamed y los tiempos necesarios del trámite de información pública y la obtención de la declaración de impacto ambiental por parte del Ministerio [...]», aclara el pliego de condiciones.

La desaladora de la Axarquía es una necesidad acuciante para una comarca que sigue en nivel de sequía grave, que tiene el peor régimen de precipitaciones de la provincia y un fuerte componente agrícola. Hay que tener en cuenta que los hogares de la comarca consumen 22 hectómetros cúbicos l año, que ahora proceden en su mayor parte del embalse de La Viñuela, en menor medida de los pozos del Chíllar, y, eventualmente aunque ahora no, de transferencias desde Málaga capital.

La nueva ubicación de la desaladora está aún pendiente de confirmarse formalmente, pero estaría a unos dos kilómetros al este de la inicial, que estaba cerca del centro comercial el Ingenio y de la depuradora de Vélez-Málaga. Se situaría también a otros dos kilómetros de la costa aproximadamente en una zona conocida como Las Campiñuelas, en el Camino de Torrox, próxima al cauce del río Seco. Son los terrenos que ha propuesto el Ayuntamiento de Vélez-Málaga, encargado con la Consejería de Agricultura de la Junta de facilitar este trámite a la sociedad estatal Acuamed.

Agricultores y Axaragua contrataron a una empresa de ingeniería malagueña que señaló tres posibles alternativas: la inicialmente puesta a disposición por el Ayuntamiento y la Junta; otra cercana a la primera, y ésta, un tanto más alejada. Al determinarse que está era la más ventajosa, se inició la redacción del proyecto básico en septiembre de este año. La idea inicial era entregárselo a Acuamed el pasado mes de febrero para que pueda empezar con los trámites de proyecto. Sin embargo, este plazo se ha retrasado y ahora se espera que se pueda entregar «a finales de abril o principios de mayo», según ha informado el presidente de la Mancomunidad Oriental y de la empresa pública Axaragua, Jorge Martín (PP).

Los primeros avances técnicos señalan la ventaja de Las Campiñuelas porque disminuyen las inversiones y rebajan en un 30% los costes de operación y mantenimiento. La idea es mantener la toma de agua, el emisario submarino y la línea eléctrica, pero cambiar la ubicación de la planta de ósmosis inversa y la conexión con las tomas de los usuarios. En este sentido, el proyecto optimiza dichas conexiones con canalizaciones y depósitos de cabecera. Entre las cuestiones que habrían ayudado a cambiar de idea sobre los terrenos habrían pesado factores ambientales y de control de la regresión de las costas, arqueológicas y de explotación y operativas.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, ha destacado el paso «decisivo e importante» que supone la adjudicación de la gestión de ingeniería para la revisión del anteproyecto redactado de la desaladora de la Axarquía y también el «compromiso» del Ejecutivo central con esta infraestructura, «pese a ser el agua competencia de la Junta de Andalucía», según recoge la agencia Europa Press.

Según Salas, este paso «hace que se avance mucho en los plazos porque en esos 18 meses la consultora de ingeniería que se ha llevado la licitación de este trabajo evaluará no solo las alegaciones que se vayan recibiendo del anteproyecto, sino que se irá realizando también el impacto ambiental, con lo cual acortará mucho los plazos posteriores».

«Es una buena noticia porque pasados esos 18 meses tendremos las alegaciones y tendremos ya también la declaración de impacto ambiental, con lo cual creo que un paso decisivo e importante», ha dicho. En este punto, ha señalado que «ahí se ve, se constata la apuesta del Gobierno de España por la provincia de Málaga, en concreto por paliar la situación de la sequía crónica que existe en la Axarquía, a pesar, como digo siempre, de que la competencia en agua es exclusiva de la Junta de Andalucía».

«El Gobierno de España ha venido en su auxilio y ha puesto 100 millones de euros en esta importante obra hidráulica, importantísima, que vendrá a paliar esos daños de la sequía que en estos días no nos preocupamos porque está lloviendo mucho, pero que es estructural en la Cuenca Mediterránea andaluza y seguirá siéndolo por eso es tan importante este paso», ha finalizado, según la mencionada agencia.