Muere Pedro Arriola, asesor de confianza de Aznar y Rajoy y marido de Celia Villalobos

Pedro Arriola, histórico asesor del Partido Popular, ha muerto esta medianoche en Madrid, donde residía. El politólogo sevillano, nacido en 1948, acompañó a José María Aznar en su camino hacia La Moncloa. Sus caminos se cruzaron a finales de los años ochenta. Reconocido por colegas y adversarios políticos como un hombre astuto y discreto, fue uno de los interlocutores del Gobierno en las conversaciones con ETA durante la tregua anunciada por la banda terrorista, que intentó asesinar en dos ocasiones a su mujer, Celia Villalobos, quien fuera alcaldesa de Málaga y ministra de Sanidad. Se conocieron en Málaga, donde Arriola estudió Ciencias Económicas, y tienen tres hijos.

Arriola mantuvo sus funciones como gurú de Génova tras la salida de Aznar y el ascenso de Mariano Rajoy pese a la resistencia del sector más conservador del partido. Sobrino del poeta Juan Ramón Jiménez, finalizó su carrera profesional tras la llegada al PP de Pablo Casado, con quien nunca se entendió. Antes había asesorado a Rajoy en el conflicto catalán, ya como principal estratega de los populares, capaz de interpretar sondeos casi sin margen de error y elaborar el argumentario y los principales discursos presidenciales. Nunca quiso un cargo orgánico ni formar parte del Gobierno. Se jubiló en 2018, a los 71 años, tras más de tres décadas como aplaudido asesor demoscópico y electoral.

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«Era un hombre competente y culto. Me ayudó mucho en mi vida política, fue una excelente persona y sobre todo un gran amigo», ha escrito Mariano Rajoy en Twitter. En la misma red social ha sido alabado por Pablo Iglesias: «Conocí a Pedro Arriola y hablé alguna vez con él. Era un hombre extremadamente inteligente y con un enorme talento para la sociología electoral. Mi pésame a todos sus familiares y amigos». También el presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha querido recordar «a un hombre brillante que supo aconsejar con inteligencia y altura de miras a dos presidentes del Gobierno de España, un maestro que deja una profunda huella en sus seres queridos y en la sociología». El presidente andaluz ha enviado «todo nuestro cariño» a Celia Villalobos.

El poeta malagueño Jorge Villalobos, sobrino de Arriola, lo ha calificado como «una persona de la que he aprendido mucho y a quien he admirado, un poeta discreto de la política». El presidente de la Diputación, Francis Salado, considera su muerte «una pérdida irreparable». La periodista Rosa Villacastín ha destacado que era «un buen amigo, inteligente, magnífica persona y gran conversador» y ha enviado «todo mi cariño a Celia y sus hijos, que están pasando el peor día de su vida».

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