La Junta abrirá la movilidad entre provincias desde esta medianoche, pero mantiene el cierre de Andalucía

Moreno reconoce que la cuarta ola ha tenido un comportamiento «mucho más suave que las anteriores» y ya muestra una curva estabilizada, aunque reclama «prudencia» hasta que se alcance la inmunidad de grupo. Por eso Andalucía mantendrá el toque de queda entre las once de la noche y las seis de la mañana. El comercio y la hostelería podrán abrir hasta las 22.30 horas. Los bares, restaurantes y cafeterías no podrán admitir nuevos clientes desde esa hora, pero podrán permitir la estancia de los clientes que ya estuvieran dentro hasta las 23 horas, siempre que se respete el toque de queda. Desde la Junta explican esta aparente incongruencia (abrir los establecimientos hasta las once de la noche pero exigir que se cumpla el toque de queda que comienza a esa misma hora) alegando que puede haber clientes «que residan junto a los locales», aunque insisten en que «el regreso de un restaurante, obviamente, no es excepción para incumplir el toque de queda». Las reuniones continúan limitadas a un máximo de seis personas en el exterior y cuatro personas en espacios interiores. Todas estas medidas permanecerán vigentes hasta el 9 de mayo, cuando finaliza el estado de alarma.

Moreno confesó ayer que los pronósticos de esta cuarta ola «no eran buenos», aunque la vacunación ha amortiguado sus efectos: «Temíamos que ocurriera algo parecido a lo que sucedió después de Navidad». El presidente autonómico subraya que Andalucía ha puesto más vacunas de las que ha recibido por parte del Gobierno al utilizar los polémicos «culillos», como definió el consejero Jesús Aguirre a la dosis de más que puede extraerse de algunos viales. Uno de cada cuatro andaluces mayores de 16 años ha recibido al menos una dosis de alguna vacuna contra el coronavirus, aunque Moreno se mostró especialmente satisfecho por los datos registrados entre mayores de 60 años, franja en la que más de un 68 por ciento de las personas tienen ya al menos una dosis inoculada. «La vacuna funciona», incide el presidente: «En las residencias prácticamente ha desaparecido el virus y los contagios se han desplomado entre sanitarios».

El anuncio del inicio de la desescalada tras esta cuarta ola coincide con una nueva reducción de la incidencia acumulada en Andalucía, que encadena ya ocho días consecutivos de descenso. La tasa media había caído ayer hasta los 237 contagios por cada cien mil habitantes en los últimos catorce días, aunque hay grandes diferencias entre provincias, desde los 416 casos de Granada, el peor dato de toda la región, hasta los 136 casos de Málaga, la provincia andaluza con menor incidencia de la enfermedad.

La tasa media ascendía el martes de la semana pasada a 259 contagios, 21 puntos menos que ayer Aunque el comité de expertos analiza más indicadores que evalúan el avance de la pandemia, como la ocupación hospitalaria y la incidencia entre mayores de 65 años, la reducción de la tasa de contagios ha resultado fundamental para que la Junta alivie las restricciones decretadas antes y después de Semana Santa.