El PP arrebata la Alcaldía de Canillas de Aceituno al PSOE con el apoyo de IU

El popular Vicente Campos González es desde ayer el nuevo alcalde de Canillas de Aceituno tras prosperar la moción de censura registrada por el PP e IU, arrebatando de este modo la Alcaldía al PSOE. Los socialistas gobernaban en el municipio junto a IU hasta julio pasado, cuando se rompió el pacto entre ambas formaciones y los dos ediles izquierdistas fueron expulsados del gobierno local.

De nada sirvió el intento in extremis por parte de la exalcaldesa, la socialista Pilar Ortiz, de intentar suspender el pleno presentando ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo un recurso contra la validez de la moción, toda vez que el tribunal comunicó su rechazo unas horas antes de la sesión. Tampoco tuvieron efecto alguno los intentos de la dirección provincial de IU por evitar que los dos ediles de la formación dieran su apoyo a un alcalde del PP.

Vicente Campos fue investido alcalde con los votos de los cuatro concejales del PP y los dos de la coalición de izquierdas, que pasan a formar parte del nuevo gobierno municipal, pese a las advertencias del coordinador provincial de IU, José Antonio Castro, sobre el inicio de un expediente de expulsión. Los cinco ediles del PSOE, que fue la formación más votada en las elecciones municipales de 2011, votaron en contra.

El nuevo alcalde justificó la moción de censura en «la mala gestión» de los socialistas y «para sacar a Canillas de la dejadez a la que ha sido arrastrada por el anterior equipo de gobierno». Asimismo, dijo que será alcalde para todos y cada uno de los vecinos, y agradeció «el ejercicio de responsabilidad» de los dos concejales de IU, cuyo portavoz, Rafael Pérez, justificó su apoyo en la voluntad expresada por la asamblea local del partido y en la necesidad de cambio.

La exalcaldesa, Pilar Ortiz, que defendió su gestión al frente del Consistorio, criticó a los concejales de IU, a los que calificó de «mamporreros de la derecha». También dijo que la moción era una «maniobra pensada tan sólo para satisfacer ambiciones personales y afanes económicos de los firmantes».