Los empresarios locales impugnan la oferta del jeque para ampliar el puerto

Se atisba marejada en aguas del puerto de La Bajadilla. La pugna por hacerse con la obra de ampliación del recinto náutico y su explotación durante los próximos 40 años no se quedará solo en la valoración que los técnicos de la Junta de Andalucía hagan de las dos ofertas presentadas: de una parte la unión temporal de empresas (UTE) Nasir Bin Abdullah & Sons y Ayuntamiento de Marbella y de otra la del Consorcio Unión Temporal de Empresarios Marina Internacional de Marbella, integrada por inversores locales. Estos últimos han revisado al dedillo las bases del concurso público y las credenciales de su competidor y han decidido impugnar la candidatura del jeque catarí Abdullah Al-Thani, propietario del Málaga, al entender que no cumple con los requisitos exigidos.

Así lo explicó a este periódico José Carlos Martín, uno de los socios del grupo local y presidente de Marinas del Mediterráneo. El recurso interpuesto ante el Gobierno andaluz va en un doble sentido. De una parte argumenta que el Ayuntamiento no puede integrar una unión temporal de empresas por su propia naturaleza. «Negamos que como entidad de derecho público sea una empresa mercantil», señaló. El Consistorio marbellí y su sociedad municipal Puerto Deportivo se aliaron con el jeque catarí en un golpe de timón de última hora del que han trascendido pocos detalles.

Pero no es el único reparo que ponen los empresarios locales. El segundo argumento con el que pretenden quedarse solos en la puja por la ampliación de La Bajadilla tiene que ver con la solvencia económica y financiera. Según recogen las bases de la licitación, la facturación media anual de la empresa en los últimos tres años debe superar los 30 millones de euros. Según afirmó Martín, la empresa vinculada al jeque catarí se constituyó el pasado año, por lo que no ha podido acreditar estos ingresos. «Al final estamos haciendo ficción con los presupuestos generales del Ayuntamiento. Si la empresa del jeque catarí no ha tenido capacidad de facturar ni la sociedad municipal tampoco, que se den como válidos los presupuestos del Ayuntamiento es una barbaridad», valoró sin rodeos.

Desde la Consejería de Obras Públicas aseguraron no tener constancia de momento de este recurso, al tiempo que matizaron que tampoco afectaría a la fase en que se encuentra el procedimiento. Actualmente, tras la apertura la semana pasada de las ofertas económicas, los técnicos de la mesa de contratación están elaborando el informe que se elevará al consejo de administración, organismo que adjudicará el proyecto. Si hay algún insatisfecho, será el momento de los recursos y las impugnaciones.