

Secciones
Servicios
Destacamos
EUGENIO CABEZAS EUGENIO CABEZAS eugeniocabezas@gmail.com
Domingo, 5 de septiembre 2010, 03:53
A sus 57 años, Enrique Gaviria y su mujer Margarita Blanco siempre habían soñado con tener una casa en Málaga. Pero este matrimonio de empresarios nacidos en Colombia aunque afincados desde su juventud en Miami (EE. UU.) no querían una vivienda cualquiera, en el centro de la capital o en una de las innumerables urbanizaciones de la periferia. Siempre quisieron tener una propiedad diferente, con estilo propio.
Y tras muchos años de espera, su sueño se ha hecho realidad, pues ha terminado de construir Casa Blanco, una original vivienda situada en el casco urbano de la pequeña localidad axárquica de Totalán y muy próxima a Rincón de la Victoria, con forma semicircular, tres plantas de altura y levantada íntegramente con hormigón, acero y cristal.
A simple vista y echando una ojeada desde el exterior, ya se comprueba claramente que no se trata de una casa más, pues el diseño es totalmente innovador, obra del afamado arquitecto de origen norteamericano y fallecido en 2006, Simón Ungers, «que se la dejó hecha como un regalo a mi esposa, ya que en su juventud se conocieron y fueron muy buenos amigos», explica Gaviria, quien recuerda que la elección de la pequeña y tranquila villa axárquica de Totalán fue totalmente casual, «con la ayuda de Google Maps», apostilla entre risas este estadounidense.
«Una parte de nuestra infancia la pasamos en Málaga capital, ya que yo estuve interno en el colegio San Estanislao de El Palo, por lo que siempre habíamos soñado con volver algún día a estas tierras», cuenta Gaviria, que se dedica al mundo de la producción audiovisual. «Actualmente, estamos pasando aquí varias temporadas a lo largo del año, pero tenemos claro que cuando nos jubilemos, nos vendremos a vivir aquí todo el año. El clima es magnífico, la gente es muy cercana y amable y nos encanta el paisaje», continúa el propietario de la casa.
Sostenible y bioclimática
Entre las particularidades de la vivienda -para la que sus dueños no descartan solicitar algún tipo de figura de protección y que quieren que forme parte del circuito de visitas turísticas del municipio-, están los materiales con los que ha sido construida: hormigón, acero y cristal. «Es totalmente sostenible y bioclimática, ya que tiene mucha luz natural», apunta Gaviria.
«Casa Blanco es una vivienda decididamente moderna y totalmente vanguardista en su concepción arquitectónica», afirma. Sin embargo, su volumen blanco - un gran cubo con recortes en forma de semicírculo y que se eleva tres plantas en la pendiente de la parcela-, recuerda también a las casas tradicionales de campo que la rodean.
Gaviria prefiere no desvelar cuánto han invertido en su construcción, «pero ha sido mucho», dice. El interior tiene una decoración minimalista y modernas comodidades, que contrastan con las vistas de la sierra y del mar.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.