El sector alimentario busca la novedad frente al avance de las marcas blancas

Queso de chocolate, de vegetales y con sabor a salsa 'tex-mex'; foie gras de turrón de jijona o mojitos sin alcohol inauguraron ayer en Barcelona el salón Alimentaria. El sector lleva dos años muy afectado por la crisis, por el descenso del consumo y los precios y por el fuerte empuje de las marcas blancas, que no paran de robarles cuota de mercado. Por ello, no les queda más remedio que reforzar su imagen y apostar por la innovación, no sólo para recuperar el terreno perdido, sino también porque el consumidor no para de evolucionar. El usuario exige nuevos gustos para colmar las satisfacciones de los más sibaritas, está cada vez más preocupado por la cocina saludable, por los productos ecológicos y habrá una mayor exigencia en este sentido, demandando información detallada que le permita verificar la propia calidad de los productos que consume.

Los expertos consideran también que el consumidor de hoy es más diverso y complejo, reflejo de la propia sociedad, más centrado en la búsqueda de experiencias enriquecedoras más allá del simple consumo básico de productos o servicios. Y tiene muy en cuenta la sostenibilidad y la ecología.

Así, la búsqueda de novedades por parte de las marcas queda ampliamente plasmada en el salón. Por ejemplo, Cavas Torelló presenta una nueva botella que lleva la firma de Custo y de la que sólo se harán 5.000 unidades; o los jamones Joselito, con nuevos cofres para sus jamones de 68 meses de curación, servidos a todo lujo, o presentaciones de alta costura con la rúbrica de Andrés Sardà.