La Universidad destina al Club Deportivo más de 700.000 euros de sus presupuestos

El CD UMA ha venido funcionando como medio propio de la UMA (un organismo autónomo pero dependiente de la administración matriz y de la que recibe encargos por los que cobra una determinada cantidad). Así lo recoge el presupuesto de 2023. Aunque la Junta de Andalucía ha descartado, de momento, que se le pueda dar ese tratamiento legal de medio propio, por lo que ha rechazado su inscripción en el registro de entidades deportivas, lo que ha llevado al rector, Teo López, a decretar la suspensión de sus actividades hasta que se aclare su situación legal.

Esta suspensión de actividades ha dejado a muchos usuarios sin poder realizar la práctica deportiva que tenían contratada. Solo el martes se recibieron unas 30 reclamaciones. La UMA, por mensaje SMS, avisó a los usuarios de la devolución de la cuota correspondiente al mes de febrero.

Los medios propios, como es la Fundación General o parecía ser también el Club Deportivo UMA, funcionan mediante encargos de la propia Universidad, que cada año consigna un presupuesto en función de los trabajos que se encomiendan al principio del ejercicio. En concreto, el club tenía para el 2023 dos encargos por parte de la UMA, 'Impartición y tutorización de actividades del programa de actividades de la Universidad de Málaga', por 612.684 euros, y 'Gestión de los equipos federados de la Universidad de Málaga', por 110.000 euros, lo que hace una suma de 722.684 euros.

Para el primer encargo, el de impartición y tutorización de actividades, la partida de 612.684 euros se desglosa en 49.304 euros de gastos generales, 126.000 euros para nóminas de personal de administración y otros 437.380 euros para las nóminas del personal del programa de actividades.

Los gastos de los equipos federados (fútbol-sala, rugby y judo) asciende a 494.400 euros, que se desglosa en 336.050 euros para el personal técnico y deportivo y 151.700 como gastos de participación en competiciones.

Estos gastos de los equipos federados, un coste anual de 494.400 euros, se ven compensados por los ingresos previstos, 384.400 euros: 110.000 de subvenciones, 244.400 por patrocinios, 10.000 euros por venta de entradas y otros 20.000 por venta de abonos.

El Club Deportivo UMA ha asegurado, mediante un comunicado, que ha cumplido con la legalidad y ha actuado con «total transparencia». Así, señalan que el Club Deportivo Universidad de Málaga es un órgano creado por la Universidad de Málaga y se encuentra registrado en el Registro Andaluz de Entidades Deportivas de la Junta de Andalucía con el número 2863 desde el 1 de julio de 1988. Desde el año 2018, y de forma anual, desde la Universidad de Málaga se ha reconocido al Club Deportivo Universidad de Málaga como medio propio de la Universidad de Málaga realizando los encargos pertinentes al Club Deportivo.

Estos encargos son servicios vinculados a la tutorización, monitorización e impartición del programa de actividades de la Universidad de Málaga así como la gestión de las secciones deportivas de la Universidad de Málaga (fútbol sala, rugby y judo).

Tras la resolución del rector, los técnicos deportivos han cesado su actividad en el complejo deportivo universitario de forma temporal hasta que se encuentre una solución. Son 18 monitores (un número que varía en función de la demanda de cursos) y 55 personas entre personal técnico y deportistas.

Confiando en que el problema se solucione con rapidez, el club asegura en un comunicado que «hemos trabajado arduamente para fomentar la práctica deportiva entre nuestros estudiantes, docentes y personal de la Universidad de Málaga. A través de nuestras diversas disciplinas deportivas, hemos promovido una cultura de bienestar, activa y saludable, que ha beneficiado a todos los miembros de nuestra comunidad». Al mismo tiempo, destaca que «nuestras actividades se han realizado siempre en pleno cumplimiento de las normativas y requisitos establecidos por la Universidad de Málaga y las autoridades competentes. Hemos trabajado de manera coordinada con las instancias correspondientes para garantizar que nuestras actividades cumplan con los estándares de calidad y seguridad necesarios».

Y, finalmente, lamentan que la reciente resolución del rector «haya generado dudas o inquietudes en relación con nuestras actividades, ya que hemos buscado siempre actuar en total transparencia y con un compromiso inquebrantable con la comunidad universitaria».