Fuerte frenada al crecimiento de la Universidad de Málaga. El plan plurianual de inversiones del cuatrienio 2020-2023 ha saltado por los aires y la ... escasez de dinero ha obligado a los responsables de la UMA a «priorizar» las inversiones, continuando las más urgentes, como la nueva Facultad de Turismo o la ampliación de Filosofía y Letras y Ciencias, ralentizando otras o directamente paralizando los procesos administrativos de adjudicación de proyectos o de obras.
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Buena parte del dinero ahorrado en los últimos años por la UMA (los denominados remanentes de tesorería) fue reclamado el año pasado por la Junta de Andalucía para el fondo de emergencia social y económica para hacer frente a la pandemia. La UMA fue la universidad andaluza que más aportó a ese fondo, 36 millones, una cuarta parte del total, pues era la que contaba con más dinero ahorrado.
Ese ejercicio aún pudo mantener el esfuerzo inversor en infraestructuras (continuaron los trabajos en el Pabellón de Gobierno y la Facultad de Psicología y Logopedia, empezó Turismo y avanzó la primera fase del bulevar), gracias precisamente a esos remanentes de tesorería.
Pero este año la UMA ha tenido que levantar el pie del acelerador y muchas de las obras previstas quedan directamente paralizadas por falta de dinero: La 'hucha' de los remanentes está casi vacía. El proyecto de presupuestos de la Junta para 2022 ha venido a agravar la situación. El rector, José Ángel Narváez, criticaba este jueves las cuentas públicas, «claramente deficitarias», pues no cubren siquiera los gastos básicos de la UMA y le impiden mantener el esfuerzo inversor.
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Entre las obras que quedan en suspenso se encuentra el edificio de aparcamientos previsto junto a la Biblioteca General. Las escuelas de Informática, Telecomunicación e Industriales tendrán que esperar para hacer realidad la necesaria ampliación de sus instalaciones, con más de 9 millones de inversión en total. También se retrasa la ampliación de la Facultad de Derecho (6 millones de presupuesto).
En la ampliación de Teatinos también está previsto levantar un edificio para uso de los estudiantes, el Servicio Central de Informática y un edificio para los servicios técnicos de la UMA, con casi 15 millones de euros reservados en el plan plurianual de inversiones.
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La segunda fase de la ordenación paisajística del bulevar Louis Pasteur también se ve afectada por esta escasez de dinero. Con casi seis millones previstos para continuar las obras del gran bulevar hacia la ampliación, la UMA ha decidido no encargar el proyecto. De hecho, la Universidad «ha gastado millones de euros y muchas horas de trabajo en proyectos que ahora no se pueden ejecutar. Es una inversión en tiempo y dinero que no sabemos cuándo se podrá recuperar», señala la vicerrectora de Smart Campus, Raquel Barco.
En otros casos, edificios ya prácticamente terminados no tienen calendario para su inauguración. Es el caso del nuevo Pabellón de Gobierno o Rectorado, que se ha levantado en la ampliación de Teatinos. La obra civil está casi terminada, pero la UMA no ha podido hacer pública la licitación del mobiliario «ni sabemos cuándo se podrá sacar», apunta la vicerrectora. Es una inversión millonaria, teniendo en cuenta que en este edificio estarán los despachos del rector y de todos sus vicerrectores así como unos 350 puestos de trabajo. El Paraninfo, que se ubica junto al Rectorado, cuenta con 800 localidades. «Podríamos haber sacado a concurso el amueblamiento, pero no ha sido posible. Nos vamos a encontrar con un edificio terminado y sin poder darle uso, en el mejor de los casos, en un año, porque no tenemos dinero para los muebles», explica Raquel Barco.
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El rector, José Ángel Narváez, ha reconocido que la situación económica por la que atraviesa la Universidad de Málaga le impedirá cumplir su programa de gobierno en cuanto a nuevas infraestructuras. La UMA aprobó un ambicioso plan plurianual de inversiones, de hasta 126 millones, que ahora el rector, a mitad de su segundo mandato, da por irrealizable. «Hemos tenido que priorizar nuestras inversiones. Teníamos un plan muy ambicioso, pero ante el recorte en nuestros remanentes de tesorería hemos tenido que priorizar, por lo que este plan plurianual irá más lento de lo previsto«,
El rector ha calificado de «regular» la situación financiera de la UMA, aunque descarta que haya problemas para pago de nóminas o gastos corrientes. «Hemos perdido 85 millones de nuestros remanentes (ahorros), por lo que nuestra situación es solo regular», señala. Además, la UMA ha tenido un gasto extraordinario por Covid, «que no nos ha sido compensado», afirma Narváez. «La Universidad de Málaga, como el resto de universidades andaluzas, estamos muy preocupadas por este modelo de financiación de las universidades que es un modelo de reparto en el que lo único que hay claro de momento es que podemos perder un 5% de nuestro presupuesto». Este jueves, el rector envió a la comunidad universitaria un comunicado en el que expresa su preocupación por los presupuestos de la Junta, que dibujan un escenario «claramente deficitario» para la Universidad.
La UMA tuvo que aportar al fondo de emergencia social y económica frente a la pandemia 36 millones de sus ahorros y también salieron de estos remanentes las inversiones previstas en 2020, más de 35 millones. De esta manera, la 'hucha' de la UMA ha quedado reducida a unos 50 millones. La Junta anunció una partida para infraestructuras de 16 millones, pero el rector asegura que «cuando pongan ese dinero sobre la mesa, podremos valorarlo».
Otra de las grandes obras que se ejecutan en la ampliación es la nueva Facultad de Turismo, adjudicada el pasado enero a Acciona Construcciones con un presupuesto de 18,9 millones de euros más 3,9 millones en concepto de IVA y un plazo de ejecución de dos años. De momento las obras siguen en marcha, aunque Raquel Barco no puede asegurar «al cien por cien» que más adelante se puedan ver afectadas.
No todo son noticias negativas respecto a los planes de inversiones de la UMA. Filosofía y Letras y Ciencias continúan adelante con sus proyectos de ampliación. En el caso de Filosofía han salido a licitación las obras, con un proyecto de 12 millones de euros. En una primera fase se llevarán a cabo varios módulos nuevos y una renovación de parte de la facultad. En una segunda fase se hará una nueva biblioteca. Finalmente, en una tercera fase se terminará de renovar todo el centro. También Ciencias se encuentra entre las prioridades en inversión, dado que es uno de los edificios más antiguos del campus de Teatinos.
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