

Secciones
Servicios
Destacamos
Las obras del gran bulevar en el campus de Teatinos están consumiendo tiempo y dinero y no avanzan según lo previsto. Tantas son las indefiniciones ... y desencuentros entre la constructora y la dirección facultativa, que Vías ha solicitado formalmente a la Universidad la paralización de las obras. Aunque la decisión no está tomada, en la zona se ven en los últimos días menos trabajadores y movimiento de maquinaria.
La vicerrectora de Smart-Campus, Raquel Barco, ha confirmado el escrito de Vías solicitando la paralización de las obras, pero aclara que la Universidad aún no ha tomado esa decisión y que esperan la respuesta de la dirección facultativa sobre los problemas surgidos en la concreción sobre el terreno de un proyecto que la vicerrectora reconoce complejo. «No es un parque al uso. No se trata de plantar césped y árboles y se acabó. Desde un principio se planteó como un espacio de divulgación, de ocio y tecnológico, lo que supone una mayor complejidad».
Según la vicerrectora, la Universidad aún no ha tomado una decisión respecto a la petición de la constructora y han trasladado a la dirección de obra esta solicitud para que la estudie y responda. «Vamos a esperar a que contesten y nos den explicaciones antes de tomar cualquier decisión. Es un problema entre constructora y dirección facultativa, que tienen que entenderse y aclararse entre ellos. Antes de responder a la petición de parar las obras tenemos que saber si es una decisión fundamentada o no», aclara Raquel Barco.
Sobre el terreno se puede comprobar el importante retraso que acumula la obra. Tras las últimas ampliaciones por modificaciones del proyecto, debería haber estado terminado para este mes de noviembre. Pero la impresión sobre el terreno es que queda mucho por hacer.
El bulevar Louis Pasteur recorre todo el campus de Teatinos y la ampliación, desde las facultades de Derecho y Ciencias de la Educación, atravesando la calle Jiménez Fraud para llegar a la ampliación pasando por Informática y Telecomunicaciones y el Pabellón Deportivo. Estos tres kilómetros de bulevar se dividieron en cuatro fases de obras. En esta primera se actúa sobre unos 750 metros y se aborda el ajardinamiento y urbanización de los espacios libres en el tramo comprendido entre las calles Jiménez Fraud y Jenofonte y zona verde del Centro Meteorológico.
La solución que plantea el equipo de arquitectos prevé la transformación del bulevar de «espacio residual e infrautilizado» a espacio público principal dentro del campus «gracias a las nuevas características espaciales, a un programa muy articulado, a un nivel de confort climático mejorado y a una conectividad continua en todo el espacio». El proyecto responde a un nuevo concepto de campus conectado, verde, abierto e interactivo, que proyecta el mundo académico a la calle y permite una interacción entre lo digital y lo físico, señalan.
En torno al recorrido del bulevar Louis Pasteur, que abarca los campus de Teatinos y su ampliación, así como la conexión entre ambos, se plantea el asentamiento de un corredor verde donde se dispondrán de diferentes espacios con especiales características y equipamiento que le proporcionen inteligencia y sostenibilidad.
El bulevar será así una sucesión de plazas, paseos y parques, cada uno con su propia identidad. Frente a la Biblioteca General irá la 'Plaza de la Cultura', que estará dotada de instalaciones audiovisuales y de un gran ágora que servirá como punto de reunión para todo tipo de eventos, tanto de la UMA como de la ciudad. Al ser la zona más cercana al barrio de Teatinos se planean múltiples usos en la confluencia entre cultura, academia y ciudad.
Entre las zonas deportivas y el Hospital Clínico se sitúa la 'Plaza de la Salud', que se plantea como una extensión de las actividades deportivas, lúdicas y saludables al espacio público. Para ello se adapta la topografía creando superficies que ofrecen múltiples opciones de uso, y se equipa para mostrar actividades de relación saludables entre el cuerpo y el medio ambiente.
El propio campus generará energía eléctrica, mediante paneles solares integrados en las cubiertas de los 'hubs' y que se verterá a la red de media tensión de la UMA. También resulta llamativo la extensión de la tecnología a lo largo de todo el bulevar, con acceso a internet o una red de sensores para medir las condiciones ambientales.
El proyecto llamado a transformar terrenos baldíos y aparcamientos en un espacio verde y de ocio ha sido elaborado por Ecosistema Urbano Arquitectos en Unión Temporal de Empresas con Cristina Armuña González, Gabriela Posadas Martínez y Sonia Tato Serrano. En octubre de 2019 se licitaron las obras, que se adjudicó la empresa Vías. En septiembre de 2020 se formalizó el contrato, con un plazo de ejecución de 12 meses. El presupuesto del contrato era de 7,5 millones de euros. Pero en mayo de 2022 se aprobó una modificación del proyecto, valorada en 3,7 millones de euros, al abordar obras no previstas, como el trazado del vial norte y el traslado de unas líneas de alta tensión. De esta manera, los 11,2 millones a los que asciende en estos momentos la obra del bulevar, de 750 metros, suponen más de la mitad del presupuesto previsto inicialmente, 20 millones de euros para los 3 kilómetros de longitud total.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.