Algún colega comentó al decano de Turismo, en broma pero no sin cierta carga crítica, que los alumnos de Ciencias Gastronómicas se van a dedicar a freír huevos. Antonio Guevara ha hecho de la crítica velada un reto y la inauguración del laboratorio de ... Enogastronomía estuvo protagonizada por algo tan típico, sencillo y sabroso como el huevo frito con patatas. Pero para desmentir a los escépticos sobre el nuevo grado de la Facultad de Turismo, Antonio Guevara se rodeó de uno de los grandes chefs malagueños: Sergio Garrido. Su técnica y maestría demostraron que la gastronomía puede tener mucho de ciencia y que unos simples huevos fritos pueden dar para estudios científicos, análisis y quizás alguna tesis. 'Freír' patatas sin aceite, y un huevo con una sola gota (eso sí, de Finca La Torre, varios años premiado como mejor aceite virgen extra ecológico) y que queden sabrosos, en su punto y, lo más importante, con todas sus propiedades nutritivas, tiene mucho de ciencia. Sergio Garrido y María Montilla lo demostraron a los invitados a la inaguración del laboratorio.
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Ya lo había adelantado la profesora Nuria García-Agua, del departamento de Farmacología de la UMA: hay técnicas que puede mejorar los alimentos, y otras que los echan a perder. Que según se fría un producto, puede conservar o no sus propiedades nutritivas. Y que cocer las verduras, por ejemplo, puede suponer que se pierdan las proteínas hidrosolubles, algo que se puede evitar con unas gotas de aceite. Hábitos de vida que presumimos saludables pero que, si no se manipulan bien los alimentos, pueden acabar con sus propiedades. Algo que también estará muy presente en estos nuevos estudios.
Inauguración
Profesores de la Facultad de Turismo y de otros centros de la UMA, así como representantes de las empresas patrocinadoras y colaboradoras, asistieron ayer a la puesta en marcha del laboratorio enogastronómico de la Facultad de Turismo, que será utilizado en principio por los estudiantes del nuevo grado en Ciencias Gastronómicas y Gestión Hotelera. También están previstos talleres para profesionales del sector.
Antonio Guevara agradeció a los patrocinadores su apuesta y ayuda para hacer realidad este proyecto: Fundación General de la UMA, Fundación Mahou-San Miguel, Sabor a Málaga, Cosentino y Euro-Toques. Y a todas las empresas y firmas malagueñas que están colaborando en el gastrocampus de innovación, con sesiones ya realizadas de cata de vino, aceite o frutos subtropicales.
Como objetivos a medio plazo, una vez conseguido el grado, es impartir másteres oficiales en Dirección y Gestión Hotelera y en Innovación, Gastronomía y Artes Culinarias. Y, con respecto al Gastrocampus, Guevara expuso su objetivo de formar un comité de expertos, cata de productos agroalimentarios, cursos para 'entusiastas' (sobre materias muy específicas y de corta duración) o la organización de un congreso.
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El decano aseguró que estos estudios van a suponer un cambio para la Universidad y para el sector turístico malagueño. La de Málaga es la primera universidad andaluza que imparte este título. Ha comenzado con 60 alumnos, que se forma en áreas como la gastronomía, la alimentación, la restauración o el sector del alojamiento turístico desde la perspectiva de la gestión.
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