La Universidad de Málaga ha alcanzado este curso que está a punto de terminar un récord histórico en número de estudiantes que han disfrutado de ... una beca del Ministerio de Educación y FP. Los 13.509 becarios suponen un máximo en la serie histórica, con un incremento de más de 1.100 becarios con respecto al curso anterior. La suma de las ayudas recibidas por los alumnos también es la más elevada, con cerca de 33 millones, 6,4 millones de incremento en un solo curso. El promedio medio de las ayudas por estudiante ha sido de 2.435 euros, 300 euros más que el curso anterior.
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El vicerrector de Estudiantes y Deportes, José Francisco Murillo Mas, valora esta subida histórica, hasta los casi 33 millones de euros en ayudas a los estudiantes de la UMA. Señala que se han dado dos circunstancias que explican el incremento de alumnos con derecho a esta ayuda. Por un lado, para la convocatoria de este año el Gobierno elevó el umbral 1 de renta y, por otro, se ha rebajado la exigencia de nota mínima. El umbral 1 de renta familiar da derecho a todos los componentes de la beca (matrícula, cuantía fija ligada a la renta, desplazamiento y parte variable). Por otra parte, más estudiantes han podido acceder a la beca gracias a la relajación de los requisitos académicos, de manera que se ha podido conseguir beca con un 5 en la nota de acceso a la universidad y para el resto de cursos, cuando hasta ahora se exigía un 6,5 en las titulaciones no experimentales y un 6 en las experimentales.
Los estudiantes ya pueden solicitar su beca, en un trámite que se realiza exclusivamente desde la sede electrónica del Ministerio de Educación y Formación Profesional. La convocatoria se abre para todas las etapas posobligatorias, es decir, podrán solicitar beca los estudiantes de Bachillerato, Formación Profesional, conservatorios, escuelas de idiomas y universidad, entre otros. Para los no universitarios el plazo estará abierto hasta el próximo día 30 de septiembre, mientras que para aquellos que comiencen o continúen sus estudios universitarios, ya sea de grado o máster, el plazo estará abierto hasta el 14 de octubre.
Para el vicerrector de Estudiantes, el gran reto de cara al futuro, además de la prometida reforma del sistema de becas, es conseguir agilizar su tramitación y que los beneficiarios puedan recibir el dinero cuanto antes. «Los estudiantes necesitan de esa ayuda económica, y todo lo que sea agilizar la gestión administrativa irá en su beneficio», afirmó.
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Esta convocatoria de becas generales llega con pocas novedades, a la espera de la reforma integral anunciada por el Gobierno. Uno de los cambios introducidos en esta convocatoria se refiere a la nota necesaria para poder lograr beca en el caso de los másteres habilitantes. Hasta ahora se les exigía una nota media de 6,5, que se ha rebajado al 5. Los másteres habilitantes son aquellos títulos oficiales de máster que además habilitan para el ejercicio profesional. Es el caso del máster de abogacía, de algunas ingenierías, como industrial, informática, de minas, montes o agrónomos, de psicología o el máster que habilita para ejercer como profesor de Educación Secundaria. Para el resto de títulos de posgrado se mantiene el requisito de una nota media de 7 para poder acceder a beca.
Otra de las modificaciones de la convocatoria afecta a los estudiantes de FP. En concreto, se incrementa la cuantía de la beca básica para los alumnos de Formación Profesional básica, que pasa de 300 a 350 euros (la beca básica es aquella que reciben los alumnos y alumnas no universitarios que no obtienen beca asociada a la renta).
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En el caso de los estudiantes con necesidad específica de apoyo educativo, una de las novedades de la convocatoria es la incorporación del alumnado con trastorno grave de la comunicación y del lenguaje entre los beneficiarios de estas ayudas, que pasan así a ser cinco colectivos: discapacidad, altas capacidades, trastorno grave de conducta, trastorno del espectro autista y el citado trastorno grave de la comunicación y del lenguaje.
De esta manera, el presupuesto de becas y ayudas al estudio ha aumentado en más de 128 millones, hasta los 2.038 millones de euros, en parte para incluir la entrada de nuevos beneficiarios como consecuencia de la crisis derivada de la pandemia de Covid-19. Desde 2018, el presupuesto se ha incrementado un 39,6% y el número de beneficiarios en un 24,5%.
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Además de las ayudas para los estudios universitarios, está abierto el plazo (hasta el 30 de septiembre) para las becas a los no universitarios, los niveles educativos no obligatorios que también pueden disfrutar de esta ayuda económica, como son Bachillerato, Formación Profesional y estudios musicales y artísticos, entre otros. Al igual que ha sucedido con los universitarios, estos otros niveles educativos también han experimentado un incremento importante en el número de peticiones de becas. Para los niveles no universitarios la gestión de estas ayudas se realiza a través de la Consejería de Educación, mientras que los universitarios tienen que hacer la correspondiente solicitud directamente en la web del Ministerio y la gestión corresponde a las universidades. Durante el actual curso escolar, desde la Delegación Territorial de Educación y Deporte se han tramitado más de 41.000 solicitudes de las distintas convocatorias de becas y ayudas al estudio, que son 5.000 más que hace dos cursos. De ellas casi 33.000 corresponden a becas y ayudas de carácter estatal, y algo más de 8.000 son autonómicas. En la convocatoria general el total de solicitudes ha sido de 28.152 de las que 20.633 han sido abonadas. En cuanto a las becas que corresponden a la educación especial ha habido 4.672 solicitudes de las que 3.749 han sido abonadas.
Entre las autonómicas destacan las 5.446 solicitudes tramitadas de la Beca 6000. La Beca 6000 tiene como finalidad incentivar la permanencia en el sistema educativo del alumnado que ha finalizado la Educación Secundaria Obligatoria y pretende cursar Bachillerato y Ciclos Formativos de Grado Medio de Formación Profesional en la modalidad presencial. Ofrece recursos económicos que vienen a compensar la ausencia de ingresos por la dedicación del alumno o alumna al estudio, y favorece que, al término de su proceso formativo, cuente con mayores posibilidades de encontrar empleo. El estudiante recibe 6.000 euros, en diez mensualidades de 600 euros. La Beca 6000 que comenzó en el curso 2009/2010 y se ha desarrollado durante los cursos siguientes, permitiendo que más de 77.000 alumnos y alumnas andaluces hayan conseguido realizar sus estudios posobligatorios. También son de carácter autonómico la beca Segunda Oportunidad (193 solicitudes) y Adriano (510). Por lo respecta a las ayudas al transporte escolar, la Delegación de Educación ha tramitado en este curso 2.117 solicitudes.
La beca de estudios es la suma de una cantidad fija y otra variable. Entre los componentes fijos se encuentra la beca de matrícula, que comprende los créditos de los que el estudiante se matricula por primera vez, una cuantía fija ligada a la renta familiar, de 1.700 euros, una cuantía fija ligada a la residencia, en el caso de estudiantes que residan fuera de su municipio (1.600 euros) y, finalmente, una cantidad que varía entre los 50 y 125 euros en función de los resultados que alcance el alumno (excelencia académica). La cuantía variable, de un mínimo de 60 euros, reparte el importe sobrante del presupuesto total de becas en función de la nota media del expediente y de la renta familiar.
Para estudiantes de FP, Bachillerato y otros estudios no universitarios (enseñanzas artísticas, deportivas o idiomas, entre otros), la beca básica es de 300 euros (350 en el caso de FP Básica), 1.700 por renta familiar, 1.600 por residencia y de 50 a 125 por excelencia académica. Tienen también, como los universitarios, una cuantía variable.
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Por otra parte, la Universidad de Málaga dispone este próximo curso de 88 becas de colaboración para sus alumnos, dos más que en el actual. La UMA es la sexta universidad a nivel nacional por número de ayudas que otorga el Ministerio de Educación y Formación Profesional, un total de 2.400 para todas las universidades públicas del país. La que tiene un mayor volumen de becas es la Complutense de Madrid (196), seguida de sevilla (136), Granada (133), Barcelona y Valencia (114) y Málaga y Politécnica de Madrid (88 en ambos casos).
Esta beca va destinada a aquellos alumnos universitarios que vayan a finalizar los estudios de grado, así como para alumnos que vayan a cursar primer curso de máster oficial, y es compatible únicamente con la beca de carácter general del Ministerio de Educación y Formación Profesional.
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La dotación total y única de la beca para todos los beneficiarios es de 2.000 euros.
Los alumnos beneficiarios de esta beca deberán prestar su colaboración en el departamento asignado durante tres horas diarias en los términos recogidos en el proyecto presentado, y durante siete meses y medio a contar desde la fecha de incorporación al destino correspondiente.
Con estas becas, el Ministerio de Educación y FP trata de facilitar la colaboración de los estudiantes universitarios del último curso en los departamentos, compatibilizando este trabajo con sus estudios. Los candidatos deben presentar un proyecto de colaboración a desarrollar dentro de alguna de las líneas de investigación en curso de los departamentos universitarios y que versará sobre algunas de las materias troncales u obligatorias para la obtención del título que se esté cursando.
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Se trata de una colaboración fructífera para ambas partes, ya que los estudiantes pueden tomar contacto con tareas de investigación especializadas directamente vinculadas con los estudios que están cursando, al tiempo que les ofrece la posibilidad de ampliar sus conocimientos y concretar sus intereses para la posible incorporación a futuras tareas docentes o investigadoras. Y para los departamentos supone también una ayuda importante en estas mismas tareas, ya que los alumnos se comprometen a tres horas de trabajo diarias durante siete meses y medio.
Los requisitos académicos fijan haber superado un determinado número de créditos, que supone en la práctica estar matriculados el último curso de grado o licenciatura, y fija también unos requisitos de nota mínima, que van desde un 7,25 para las ramas de Ingeniería y Arquitectura o Enseñanzas Técnicas; 7,70 puntos para las ramas de Ciencias o Ciencias Experimentales y para Ciencias Sociales y Jurídicas; 7,80 puntos para la rama de Ciencias de la Salud y un 8 para la rama de Artes y Humanidades. También pueden solicitar esta beca los estudiantes de primer curso de másteres oficiales.
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Es el Consejo Social de la Universidad el encargado de fijar la distribución de estas becas. Por acuerdo del 9 de mayo de 2017 se asigna una beca a cada uno de los 71 departamentos de la UMA que hayan avalado al menos un proyecto de colaboración, tal como recoge la convocatoria ministerial. Como hay más becas que departamentos, el resto de ayudas se conceden para los departamentos que incluyan al menos dos áreas de conocimiento pertenecientes a ramas de conocimiento distintas y los departamentos con al menos 40 profesores equivalentes a tiempo completo.
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