De Aguilera y Pimentel reprochan a Narváez que sea candidato sin dejar el Rectorado

Los tres candidatos a rector de la Universidad de Málaga -Ernesto Pimentel, Miguel de Aguilera y José Ángel Narváez- han participado esta mañana en un debate organizado por el consejo de estudiantes de la UMA que ha llenado el salón de actos de la escuela de Ingenierías. Antes del debate, los tres candidatos han departido amigablemente y, de hecho, el debate ha transcurrido de manera distendida con únicamente un par de cuestiones que han provocado contestaciones y contrarréplicas.

Los tres han planteado un proyecto bastante parecido, con una universidad pública centrada en los alumnos, profesores y personal. Un servicio público que los tres se comprometen mejorar a partir de un diagnóstico en el que hay matizaciones según cada programa.

Ernesto Pimentel, catedrático de Lenguajes y Ciencias de la Computación, ha dicho que su candidatura es fruto de su compromiso con la Universidad, que debe ser referente moral y ético para Málaga. Como estudiante que fue de la UMA le molesta que prácticas educativas que ya le afectaron en su época se mantengan y propone acabar con la precariedad del profesorado.

Miguel de Aguilera se ha referido al debate como escenario de salud democrática y que el mayor valor de la Universidad son los distintos colectivos que la conforman. A los alumnos les ha dicho que no permitirá que ningún estudiante tenga que abandonar las aulas por no poder pagar la matrícula y que promoverá billetes gratuitos para el transporte por metro dentro del campus.

José Ángel Narváez propone cambios en la organización docente, incorporar más ayudantes doctores y acabar con la figura del sustituto interino y moderar la contratación de asociados a tiempo parcial. Ha señalado que el metro nos ha partido el campus y que nos está dando más problemas que soluciones, por lo que negociará con la empresa algún tipo de compensación, como puede ser el transporte gratuito en el campus.

La cordialidad del debate se ha roto en un par de momentos. Así, cuando De Aguilera ha recordado a Narváez que lleva 21 años en tareas de gobierno, y que siendo candidato debería haber dejado el rectorado. Opinión compartida también por Ernesto Pimentel. Narváez dijo que esto supone para él un hándicap, porque nadie puede decir que yo haya desatendido las labores de gobierno, pero que asumió esa responsabilidad y por coherencia no podía dejarlo.

También De Aguilera ha hablado de mal uso de los recursos económicos en alusión a unos equipamientos que están todavía embalados en los sótanos del Cima o unos contenedores que no se pueden utilizar. Narváez ha respondido que él no era el responsable del vicerrectorado de Infraestructuras cuando se levantaron los contenedores en suelo verde.