El pacto por Yannick Nzosa: renovado con el Unicaja

El Unicaja está monitorizando la progresión de Nzosa, porque desde el pasado verano, el joven jugador, acaba de cumplir 21 años, tiene ya contrato hasta el 2027. El acuerdo ha pasado inadvertido porque en un primer momento no hubo entendimiento. El club cajista le propuso rebajarse el salario a cambio de ampliar el vínculo que los unía. Nzosa no lo veía claro teniendo en cuenta que todos los 'cincos' de la plantilla actual, salvo Kravish, tenían contratos largos y se intentaba fichar a Balcerowski, también una apuesta de largo recorrido. El Unicaja mantuvo su propuesta al jugador, que acababa su contrato en junio de 2026 con un salario considerable. El agente del pívot, Quique Villalobos, con el que trabaja desde el final del verano, le aconsejó que lo ideal para él después de dos años con varias lesiones, era seguir 'bajo el paraguas' de un club como el malagueño.

Finalmente, hubo entendimiento, aunque no trascendió, y Yannick Nzosa pertenecerá al Unicaja hasta junio de 2027. La jugada, al menos de momento, le ha salido bien al Unicaja, pues los números del congoleño en el Fuenlabrada son cada vez más interesantes con unos promedios de ocho puntos, cinco rebotes y 1,5 tapones por partido, aspecto este último en el que es el segundo mejor de la categoría de plata.

En el Unicaja se perdió un poco la fe en la recuperación de Nzosa. La gestión de su carrera por su primera agencia, el cúmulo de lesiones y las cesiones poco productivas en el Betis y casi que en el Estudiantes hicieron dudar a todos. Pero la realidad es que entre la temporada pasada y la actual, el joven jugador lleva dos años sano y eso se está notando en su buen momento.

En lo que va de temporada ha tenido partidos brillantes, como ante el Palencia con 17 puntos, ocho rebotes y cinco tapones. Y hay algo más importante, juega casi 20 minutos por partido en un equipo que pelea por el ascenso. El conjunto que dirige Toni Ten está explotando las cualidades atléticas del congoleño, especialmente con un base experimentado como Leo Westermann, tercer mejor pasador de la categoría y que logra encontrarlo con facilidad cerca del aro. Es habitual verlo hacer dos y tres esfuerzos en una misma acción, incluso enlazando acciones defensivas con finalizaciones ofensivas, y eso sólo se explica porque se encuentra en gran forma física.

Cara al futuro, si el Fuenlabrada ascendiese, la lógica sería que continuase allí cedido. En caso contrario, el siguiente paso de su carrera sería jugar en la ACB para que complete su formación con vistas a, si el técnico de turno lo decide, regresar a Málaga. No hay que perder de vista que Nzosa tiene ficha de jugador formado localmente, lo que se conoce como cupo, y no abundan interiores de sus características.